En este apartado que hemos llamado “sociedad familiar”, busco allegarlos a la cantidad de eventos que aparecen en nuestro entorno, aportándonos tanto cosas positivas como otras que no lo son tanto.

Es importante darse cuenta de porqué se dan determinados sucesos, como por ejemplo los dañinos  rumores ¿o quizá no sean siempre dañinos? por qué preferimos a un tipo determinado de personas o por qué no nos fiamos de otras tan solo por su aspecto físico.

Hay que ser un poquito más conscientes de cómo nos influye la sociedad y la familia; así cómo nosotros influimos en ellas. Las personas, aunque necesitemos de los demás somos seres individuales, lo que nos lleva a numerosos conflictos con las otras personas. Muchas veces hasta en nuestras familias de pocos miembros, en términos generales, la convivencia no es fácil, pero cuando el número de miembros aumenta se dificulta cada vez más. Pueden aparecer problemas generacionales, roces, exigencias incomprendidas, autoritarismos y rebeldía.

Aun siendo seres individuales, todos estamos rodeados por otros seres individuales y juntos formamos lo que es la sociedad. Existen muchas sociedades con diferentes culturas, creencias, modos de vivir… pero siempre habrá algo en común entre todas ellas.

Alguna vez en nuestras vidas nos hemos encontrado con alguna persona que, con o sin razón nos pone los nervios de punta. Hay gente con la capacidad de sacarte de quicio a la mínima, incluso sin conocerlos bien, no podemos con ellos; se vuelve algo superior a nosotros, casi irracional; sin embargo, si es alguien que ha pasado de puntillas por nuestra vida, lo tenemos fácil, el problema viene cuando debemos compartir algo con ellos puede ser el trabajo, algún vecino o familiar.

La sociedad familiar es el modelo indicado para aquellas familias que creen firmemente en el principio de que el todo, unido, es más fuerte que sus partes. De todos modos, debido a que la toma de decisiones puede ser difícil o lenta, estas sociedades deberán incorporar sistemas de resolución de conflictos como parte íntegramente de sus estructuras.

Dentro de la familia, también se expresa la lucha de clases. No como enfrentamiento económico, sino como enfrentamiento ideológico. Entre una generación y otra existe una convivencia personal y unos lazos afectivos, y afortunadamente no acostumbra aparecer el enfrentamiento físico.