Hoy 
POR ELIAS RUIZ MATUK
Barahona.- Tres Mil quinientos reservistas de la Infantería de Marina, Fuerza Aérea y Ejército de los Estados Unidos vendrán al país para participar en los ejercicios conjuntos y combinados «Nuevos Horizontes 2006», para lo cual se inició el desembarco de 500 hombres y equipos de construcción por los puertos y aeropuertos de esta provincia.
Los reservistas arribarán en grupos no mayores de 450 hombres durante períodos de dos semanas de febrero hasta mayo del presente año. El proyecto cuenta con una inversión total de US$1,314,000.00 es patrocinada por el Comando Sur de los Estados Unidos e incluye contratos para transporte de equipo rodante, material de construcción y manejo de desperdicios.
La información fue ofrecida ayer en una conferencia de prensa en la Quinta Brigada de Infantería del Ejército Nacional, en el que se dieron a conocer los detalles del programa y la entrada en vigencia de la llamada «Fuerza de Tarea Conjunta y Combinada, Barahona», y en la que estuvo presente el mayor general Charle Fletcher, comandante general del Ejército de los Estados Unidos y el teniente coronel John M. Reich, del departamento de Transportación con sede en Jacksonville, Florida.
Fletcher explicó a HOY que se encontraban en el país no como comandante de las fuerzas reservistas, sino que supervisaba que el transporte de los equipos y personal, que inicialmente llegaron a Puerto Rico, vinieran al país de la manera esperada.
La visita de los norteamericanos al país, que participarán en los ejercicios conjuntamente con las Fuerzas Armadas dominicanas coincide con la celebración de las elecciones presidenciales en Haití y el envío de 500 hombres a la frontera dominico haitiana, a fin de evitar la emigración masiva.
En la conferencia de prensa estuvo, además, el comandante de la Quinta Brigada de Infantería del Ejército Nacional, general Ubaldo Reyes Fernández, Pedro Corona, comandante del Grupo Consultivo de Asistencia Militar (MAAG) y Edwin Cruz, oficial de Operaciones de los ejercicios. También el director regional de Salud, Rafael Sánchez Chanlate y la gobernadora provincial, Altagracia Matos.
Reyes Fernández dijo que los propósitos de los ejercicios conjuntos y combinados «Nuevos Horizontes 2006» son las de entrenamiento, asistencia humanitaria e inversión social, por lo que la provincia de Barahona es en estos momentos receptoras de un movimiento de personas, materiales, equipos y servicios que llegan a través del aeropuerto María Montés, el puerto de la ciudad y sus carreteras.
En la provincia, dijo, serán construidas cuatro clínicas en igual número de comunidades, varios operativos médicos y un gran movimiento económico. El costo estimado por la construcción de cada clínica es de US$72,000, cada una.
«Nuestros soldados se beneficiarán con los entrenamientos de las operaciones conjuntas y con el proceso de toma de decisiones para unidades de aboyo de servicios de combate», agregó. Cruz, oficial de Operaciones de los ejercicios, explicó que los 1,500 reservistas norteamericanos que cooperarán en el proyecto vendrán paulatinamente y participarán ingenieros y médicos especialmente.
Dijo que las clínicas serán construidas en el Barrio Milton, La Lista, Mena Arriba y Los Robles, quienes además de las obras físicas, recibirán asistencia médica, pedagógica, legal y comercial. Explicó que el Nuevos Horizontes 2006 es un proyecto humanitario bilateral entre los gobiernos de Estados Unidos y el país beneficiado, en este caso la República Dominicana, que recibirá la asistencia humanitaria a largo plazo y en el que el Gobierno dominicano tendrá una participación a través de las secretarías de Salud Pública, Obras Públicas, Policía Nacional y las Fuerzas Armadas.
Protesta
La Asociación de Abogados Penalistas, Derechos Humanos, así como el Partido Comunista Dominicano y el Frente Amplio de Lucha Popular (FALPO), protestaron ayer en esta provincia por la presencia de los militares norteamericanos en el país.
«Hacemos un llamado a todas las organizaciones sociales y al pueblo en sentido general a que rechacemos la presencia de soldados norteamericano en nuestro suelo», expresa un documento del FALPO, que exigió «la salida inmediata» de los «soldados yanquis».
Al preguntársele a Reyes Fernández, comandante de la Quinta Brigada del Ejército y a Cruz, oficial de operaciones de los ejercicios conjuntos y combinados, sobre el particular, dijeron, de manera separada, que la presencia de los militares norteamericanos obedecía simplemente a los ejercicios y no tenía ningún otro interés que el de la cooperación entre ambos países.
En la sede de la Quinta Brigada del Ejército fue dispuesta un área para el campamento militar en el que ya fueron instaladas unas 40 casas de campaña militares, que cuentan con sus computadoras portátiles, materiales de construcción, áreas de servicios sanitarios, baños, purificación de agua, así como plantas eléctricas.
