NAPLUSA, Cisjordania (AP).- Soldados israelíes mataron a disparos a un hombre palestino durante un enfrentamiento con un grupo de personas que lanzaba piedras el sábado, mientras los militares continuaban implementando enérgicas medidas en esta ciudad cisjordana, dijeron testigos palestinos y trabajadores médicos.

El ejército israelí ha estado implementando sus operativos en Naplusa durante más de una semana, al considerar que es un «semillero de la actividad terrorista».

Un portavoz militar dijo que hubo protestas «muy violentas» en el área, y que manifestantes lanzaron bombas molotov contra los soldados.

Indicó que los militares sólo utilizaron recursos «no letales» para dispersar a la multitud, y que el ejército investigaba el informe sobre el tiroteo fatal del sábado.

Mientras tanto, varios miles de manifestantes se reunieron en la ciudad cisjordana de Qalqiliya para protestar contra la construcción israelí de una barrera de separación.

Unas 200 personas treparon la estructura de cemento de ocho metros y lanzaron piedras y cubiertas de goma en llamas.

Testigos dijeron que una persona resultó levemente herida en la cabeza por una bala de goma que dispararon soldados israelíes, y otros tantos fueron atendidos por inhalación de gases lacrimógenos.

El ejército expresó que utilizó granadas de humo para dispersar a la multitud cuando las personas comenzaron a treparse a la barrera, pero aclaró que no disparó ningún tipo de balas. Explicó que una piedra que lanzaron los manifestantes golpeó en la cabeza a un adolescente.

El gobernador de Qalqiliya, Mustafa Malki, pidió a la comunidad internacional que presione a Israel para que frene la edificación de la muralla, que según dijo, ha convertido a su ciudad en una inmensa prisión.

La barrera, que Israel considera necesaria para obstaculizar el paso de atacantes suicidas, incluye una pared de cemento que rodea la mayor parte de Qalqiliya, dificultando la entrada o la salida de la ciudad.

Qalqiliya es una población de unos 30.000 habitantes localizada justo en el límite de Cisjordania e Israel.

Gustav Fridolin, representante del Partido Verde en el parlamento sueco, dijo a la multitud que debería oponerse a la barrera a través de métodos pacíficos.

«Vine aquí para participar en la manifestación y para mostrarle a la gente que no está sola, hay políticos europeos y gente que piensa que la construcción de la muralla es una locura», manifestó Fridolin a The Associated Press.

En Naplusa, testigos palestinos manifestaron que Regai Rayan, un residente de 20 años del campamento de refugiados Balata, recibió un disparo en su espalda y murió después que una multitud de jóvenes comenzó a lanzar piedras a un tanque israelí.

Otros siete palestinos resultaron levemente lesionados, indicaron.

Tanques israelíes patrullaban Naplusa y soldados ingresaban en las viviendas, de acuerdo con el relato de testigos. Decenas de residentes fueron detenidos para ser interrogados, señalaron.

Las fuerzas israelíes dispusieron cerrar el área este de Naplusa, dijeron testigos y el ejército.

Los testigos explicaron que unas 50.000 personas, cerca de la mitad de la población de la ciudad, recibieron órdenes de permanecer en sus hogares.