Las escuelas y facultades de Educación del país sólo deben matricular a estudiantes que sean de nuevo ingreso, como una forma de contar, a muy corto plazo, con una nueva y pujante generación de maestros.

A juicio del asesor del ministerio de Educación Jesús de la Rosa, también es recomendable actualizar el currículo de los programas de educación en sus distintas modalidades, proceso que señaló comenzaron a realizar las universidades hace varios meses.

De la Rosa consideró, además, que es necesario reforzar los sistemas de formación y capacitación de los maestros, “ajustándolos a las demandas reales de la profesión”.

“Hoy, muy a pesar de que cerca del 90% de los profesores en ejercicio posee un título universitario, el problema de la falta de maestros capacitados sigue pendiente de solución”, sostuvo el catedrático, quien recordó los años en que la prioridad de las autoridades era garantizar profesores que tuvieran  un título universitario de la carrera.

Calidad de vida.  Sin embargo, para De la Rosa la mejor forma de garantizar que el sistema educativo disponga de docentes competentes en poco tiempo es elevando las condiciones de vida y de trabajo de los maestros que están en ejercicio, “de manera que la profesión docente sea tan atractiva como cualquier otra”, especificó.

Dijo que mejorando sensiblemente las condiciones de vida de los profesores en ejercicio, estos tendrán la posibilidad de mejorar su valoración social a través de su ejercicio profesional.

Al ser consultado por este diario sobre las mejores estrategias para mejorar los niveles de capacitación de los maestros, el académico enfatizó en la necesidad de que las escuelas de Educación proporcionen formación y titulación especializada, tanto a los docentes en ejercicio como a los alumnos de la carrera.

Faltan recursos.  En la opinión del profesor De la Rosa, la falta de recursos  impide que los técnicos y especialistas en Educación con que cuenta el país puedan poner en práctica los planes y programas de reformas de la educación que formulan.

Destacó también que la carestía de fondos frena la capacidad para que los maestros dispongan de mejores estándares de vida.

“Sabemos de sobra cómo se enseña y cómo se reforma un sistema de instrucción pública para hacer realidad tales o cuales propósitos. Pero nos faltan recursos económicos para materializar nuestras formulaciones”, apuntó De la Rosa al ser consultado.

Dijo que el sistema educativo nacional dispone de técnicos, profesionales y expertos en un número suficiente y criticó que éstos formulen  proyectos y programas de estudio, que luego son comentados  por  extranjeros, que aparecen luego como sus autores.

“La reforma de la educación no ocurre en nuestras oficinas y, mucho menos en los despachos de los ministros. Ocurre, si es que ocurre, en las aulas de clases en correspondencia con las capacidades y conocimientos de los docentes que laboran en las mismas”, puntualizó De la Rosa.

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Falta de recursos

La carencia de recursos económicos impide que los técnicos y especialistas con que cuenta el sistema educativo pongan en práctica sus planes y proyectos.

Expertos suficientes

A juicio del profesor Jesús de la Rosa, el país cuenta con la cantidad de expertos suficientes como para diseñar las reformas que requiere el sistema educativo.