Los bajos salarios del personal de enfermería en el país obligan al pluriempleo, deteriorando su calidad de vida y afectando la atención a los pacientes.

República Dominicana solo cuenta con tres enfermeros por cada 10,000 habitantes y esos pocos trabajadores de la salud se debaten entre el pluriempleo y las necesidades de formación superior.
El resultado es un personal exhausto y sin la preparación adecuada.

Conversamos con la licenciada Berta Isabel Elisa de la Cruz Crook, presidenta del Colegio Dominicano de Profesionales de la Enfermería, sobre el estado actual de la profesión y las acciones urgentes que se requieren para su mejora.

Un salario digno

Las enfermeras son esenciales en el sistema de salud, pero se encuentran en una constante batalla por un salario que refleje su valor. “Una enfermera que se gradúa hoy debería tener un salario mínimo de $50,000”, subraya De la Cruz, quien enfatiza que el gobierno debe priorizar la inversión en este sector.
Actualmente, los salarios de las profesionales de enfermería en el sistema público rondan los RD$42,000, mientras que los auxiliares ganan aproximadamente RD$33,000, cifras que a menudo son insuficientes para cubrir la canasta básica familiar.

En el sector privado, la situación es aún más precaria, donde los licenciados reciben solo RD$25,000, y aquellos en posiciones gerenciales apenas alcanzan RD$30,000. “Salvo en los hospitales de autogestión, donde los salarios son más competitivos, el personal de salud enfrenta una grave desvalorización”, señala.

En la Plaza de la Salud o en el Centro de Diagnóstico y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telemedicina (Cedimat) algunos enfermeras ganan 45,000, otras tienen sueldos de 55,000.00 “están un poquito por encima de nosotros porque funciona como un hospital descentralizado”.

Según De la Cruz, de las aproximadamente 25,000 enfermeras que hay en el país, según el último censo poblacional de 2019, alrededor de 15,000 trabajan en el sector público, mientras que unos 10,000 están en el sector privado.

Déficit de Personal

A pesar de contar con varias universidades e instituciones técnicas que forman a los profesionales de la Enfermería, existe un gran déficit en el país.

La Organización Mundial de la Salud recomienda entre ocho y doce enfermeras por cada 10,000 habitantes; sin embargo, en la República Dominicana, la cifra apenas alcanza tres. “Es esencial aumentar la cantidad de enfermeras, sobre todo en atención primaria, para aliviar la carga sobre los hospitales”, añade De la Cruz.

La proporción de enfermeras graduadas frente a las auxiliares es preocupante: aproximadamente el 85% del personal que ofrece atención son auxiliares, muchas de ellas sin la formación adecuada para lograr la recuperación de un paciente en el tiempo adecuado.

Atención primaria

La presidenta destaca la importancia de robustecer la atención primaria. “Es crucial que las enfermeras comunitarias estén bien distribuidas y supervisadas para atender adecuadamente a la población”. Una planificación adecuada y la presencia de personal calificado en estos centros puede contribuir a reducir la morbilidad y mortalidad en las comunidades.
profesionalización

El colegio también trabaja para que las auxiliares de enfermería accedan a la formación profesional. De la Cruz menciona que hay más de 1,000 auxiliares elegibles para continuar sus estudios, pero la falta de recursos y de coordinación entre las instituciones educativas y el Ministerio de Salud Pública limita este avance.

De la Cruz propone un compromiso colectivo entre el gobierno, las universidades y el Colegio para transformar la atención de salud en el país. “Si logramos organizar y planificar mejor nuestros recursos humanos, podemos ofrecer una atención de calidad que beneficie a toda la población”.

De la Cruz hace un llamado a la población: “Las enfermeras somos profesionales dedicadas a cuidar y acompañar a nuestros pacientes en todas las etapas de su vida. Necesitamos el apoyo del gobierno y la sociedad para continuar realizando nuestro trabajo con la dignidad que merece”.

Pluriempleo

Destaca que el pluriempleo se ha convertido en una necesidad para muchas profesionales de la salud, debido a los bajos salarios que reciben. Con un ingreso promedio que apenas cubre la canasta familiar, las enfermeras se ven obligadas a buscar múltiples empleos para poder sostener a sus familias y cumplir con sus aspiraciones educativas y de vida.

Lamenta que esta situación genera un desgaste que les produce el síndrome de Burnout, lo que afecta tanto su bienestar personal como la calidad del cuidado que ofrecen. Enfatiza la urgencia de mejorar las condiciones salariales y laborales, argumentando que invertir en la salud y el bienestar de las enfermeras garantiza una atención adecuada a la población.