Es común ver cómo en muchas ocasiones, por los mismos ajetreos laborales de los padres e irregularidades de las nanas o niñeras, los que tienen la oportunidad de tenerlas; dejan a los niños solos en casa o bajo la supervisión de una hermana o hermano mayor, que muchas veces es igualmente infantil. En tiempos de colegiatura, y ahora más aún en los versátiles días de verano; todos los días miles de niños llegan de la escuela o de alguna actividad de campamento a una casa vacía. Todas las semanas miles de padres deciden dejar a sus hijos solos en la casa para ir a trabajar, ir de compras o por compromisos sociales. La película muy popular “Solo en la casa” (Home Alone) y sus secuencias, presentan las destrezas de un niño para sobrevivir de manera muy jocosa, pero poco realista. Desde luego, los niños de la película se divierten, pero a veces, la realidad que enfrentan los niños que se encuentran solos es muy diferente. Si consideramos que a muchos adultos les asusta quedarse solos en casa, entonces sería totalmente comprensible que la idea de un niño/a de quedarse como responsable del hogar le ponga nervioso. Al principio, parece fenómeno quedarse solo en casa, ¿no? ¡Piensan en la libertad que van a tener en toda la casa! ¡No hay nadie que le impida jugar con los vídeo-juegos o ver su programa favorito de TV! Pero aunque no se puede generalizar acerca de cuándo se puede dejar a un/una infante solo en la casa, sí es importante que los padres consideren el nivel de madurez del niño/a y si ha demostrado ser lo suficientemente responsable y capaz de tener buen juicio crítico para el manejo de diferentes situaciones e incidentes que pudieran presentarse. Proveer un ambiente seguro es fundamental para todos los padres, abuelos o tutores. Sepa qué decirles y cómo aconsejarlos si tienen que quedarse solos por unas horas. Recuerde que el quedarse solo en la casa es una situación potencialmente peligrosa para muchos niños y adolescentes. Es importante que los padres traten de limitar el tiempo que los niños estén solos en la casa. Cuando esto ocurra, aunque sea por un corto período de tiempo, se les prepare por adelantado todo un programa indicándoles cómo pueden hacerle frente a las situaciones que puedan surgir, y siempre dándoles la confianza y seguridad de expresar si le preocupa quedarse solo/a en casa, ya que es verdaderamente importante hablar de ello, aunque esto implique que haya que pagar a una niñera o tener que cambiar sus planes.