La actividad comercial fue la que registró un mayor crecimiento durante el 2010, cuando   según el informe preliminar del Banco Central creció un 12.1%. Sin embargo ese sector tuvo sus sombras debido al incremento de la inseguridad, los apagones, el poco acceso al financiamiento, la especulación y las trabas para la importación de algunos productos.

Así lo expresaron los presidentes de la   Federación Nacional de Comerciantes y Empresarios de la República Dominicana (Fenacerd), Ricardo Rosario, y del Consejo Dominicano de Detallistas en Provisiones (Codepro), Rafael Santos.

Para los dirigentes comerciales el crecimiento que registró el sector  durante este año estuvo influenciado en los primeros meses por la campaña electoral, que implicó que hubiera más circulante en la economía. También  estimuló la demanda de productos para ser donados a Haití, luego del terremoto que afectó ese país el pasado 12 de enero.

Coincidieron en    que también el Programa  Solidaridad tuvo una incidencia positiva, especialmente en el comercio detallista de provisiones, ya que fue aumentado el número de  colmados afiliados a la red para poder despachar mercancías a los beneficiarios de la tarjeta.

Consideraron  que fue un año bueno para el comercio, pero  pudo ser mejor, si la cantidad de robos y atracos que sufrieron muchos comerciantes,  fruto del aumento de la inseguridad, no hubiera ocurrido.

También recordaron  las largas interrupciones del servicio eléctrico que afectó el país durante el año, las cuales se tradujeron en pérdidas millonarias para el sector.

Asimismo, agregaron  que  otro factor negativo para el comercio fue la escasez de azúcar y la especulación en el precio de ese producto.

   Además, sostuvieron que   las trabas puestas al  comercio organizado para participar en las cuotas de importación de ajo, la cebolla y otros productos durante este año contribuyó a que subieran los precios  y los consumidores pagarán  las consecuencias.

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Financiamiento

Otro aspecto que  los dirigentes comerciales aseguran no ayudó a pequeños y medianos comerciantes fue que persiste el poco acceso al financiamiento. Dijeron confiar en que para el próximo año se aprueben los reglamentos  de la Ley 488-08, los cuales  le  darán personalidad jurídica a esa   institución,  para  poder  acceder al  financiamiento externo,  y  apoyar ampliamente al sector de las mipymes.