MOCA. En esta ciudad es muy elevado el número de casos de sustracción de menores y violación sexual, lo que constituye una gran preocupación para la sociedad.
La denuncia en tal sentido la formuló la Coordinadora de la Unidad de Atención de Víctimas de Violencia Intrafamiliar y Abuso Sexual, licenciada Deyanira Cruceta.
Lo más preocupante es que los agresores sexuales son personas que se desenvuelven en el entorno de las víctimas, entiéndase familiares o amigos de la familia, expresó Cruceta.
Dijo que los protagonistas de estos hechos bochornosos generalmente son los tíos, primos, vecinos cercanos, hermanos o padrastros de la afectada o víctima.
Manifestó que la sociedad debe ponderar esta situación, porque es bastante peligrosa y pone en evidencia que ésta no va por buen camino.
Cruceta manifestó que hay que crear conciencia en la ciudadanía para evitar que estos hechos se produzcan con tanta frecuencia, evidenciando que la moral de la comunidad se está perdiendo.
Dijo que la violencia de género debe ser denunciada con responsabilidad por los afectados, a fin de que los culpables sean castigados con todo el peso de la ley, y así paguen por los crímenes que han cometido, no sólo en contra de la víctima, sino de la sociedad misma.
La licenciada Cruceta enfatizó que debe ser denunciada la violencia del esposo en contra del esposa o viceversa, así como la que cometen los padres en contra de sus hijos.