Al toque combinado de tanques, botellones, cubetas, aros de vehículos y sillas viejas, un grupo de niños y jóvenes del barrio Capotillo, en esta capital, dan la espalda a la delincuencia y a los vicios y se abren paso al mundo de la música.
Se trata de un proyecto que desde hace varios años viene creciendo y fortaleciéndose en el mismo corazón de la barriada, denominado Sonido de Capotillo, a través del cual se está formando una nueva generación de ciudadanos apasionados por las artes.
A pesar de las precariedades socio-económicas que afectan el entorno, los deseos de superación y de borrar los niveles de estigmatización motivan a estos muchachos a refugiarse en el local ubicado en la calle 6 esquina Respaldo José Martí para dejar salir el talento que llevan dentro. Además de percusión, son instruidos en las disciplinas de danza folklórica, danza contemporánea, jazz, ritmos urbanos, música para instrumentos de vientos, guitarra y percusión.
Una representación de los protagonistas de este programa participaron en La Esquina Joven de Hoy, donde destacaron su inclinación hacia la música y el baile.
Esta iniciativa es producto del esfuerzo conjunto entre el Instituto para el Desarrollo de las Artes y la Educación (Indarte) y la Escuela Libre de Artes Profesor Juan Bosch del ministerio de Cultura.
Senia Rodríguez, hija de la gloria nacional del folclor dominicano Nereyda Rodríguez (fallecida) y quien ha seguido el legado de su progenitora, resaltó el gran entusiasmo que provoca en ella trabajar en este sector y, sobre todo, poder guiar en todos los ámbitos de la vida a un grupo de muchachos que representan la otra cara de la moneda y que constituyen una muestra de que no todo está perdido. Esta joven artista es profesora de Danza y directora de la Fundación de Teatro Popular Danzante (Funtepod).
En el conversatorio intervinieron también los instructores de Hip Hop y Danza Jazz, José Francisco Holguín Peña y Joel Céspedes, respectivamente; el director de Indarte, José Cuello, y la coordinadora de programas del centro, Aldenia Marte, quienes han puesto todo su empeño para que el proyecto siga creciendo.
Cultura cancela profesores. Aldenia Marte explicó que lamentablemente el profesor David Armengold, quien en 2010 inició las clases de percusión experimental ya no está, porque el ministerio de Cultura, que le pagaba, decidió suspenderlo. Igual suerte corrieron otros tres instructores.
Marte pidió al titular de Cultura, José Antonio Rodríguez, reponer a ese personal para continuar con esta gran labor social a favor de cientos de niños y jóvenes de esta comunidad.
Aquí hay mucha voluntad de trabajo, no solo de los voluntarios, sino también de Indarte y no dejaremos caer el programa, pero tenemos la esperanza de que Cultura reponga a estos profesores, enfatizó.
Solo dos profesores son asalariados, los demás son colaboradores o pagados con grandes sacrificios por parte de Indarte.
Trayectoria. Según explicaron, las clases de artes iniciaron en 2004 cuando en la Escuela Libre de Artes Profesor Juan Bosch se creó un grupo de danza y otro de percusión como parte de la creación del Carnaval de Capotillo. En esta etapa jugaron un papel fundamental la profesora Nereyda Rodríguez, el profesor José Encarnación José Tambora-, y el equipo de la Fundación Teatro Popular Danzante, quienes sin cobrar un centavo, dieron inicio a este hermoso proyecto.
En febrero de 2007, Indarte realiza una alianza estratégica con el ministerio de Cultura, por medio del cual la entidad estatal pagaría los profesores de danza, percusión, teatro y música, mientras que Indarte aportaría locales, vestuarios, instrumentos musicales y logística, entre otros.
LA CLAVE
Enfoque
Indarte trabaja en la transformación de la comunidad de Capotillo, formando jóvenes en carreras técnico laboral. De acuerdo con su director, José Cuello, tienen un acuerdo con el Politécnico Santa Clara de Asís para capacitar a los alumnos de tercero y cuarto del bachillerato, en formación acorde al tipo de bachillerato que realizan. Llevan 13 años de trabajo en el barrio y ya están en otras zonas.