Existen platos en la gastronomía que son tan tradicionales que no pueden excluirse  de nuestra oferta culinaria.

La popular sopa de cebolla es una de esas delicias. Es  un caldo de verduras cuyo ingrediente principal, obviamente es la cebolla.

Para elaborar esta sopa  se cortan muchas cebollas en forma de brunoise (brunuá) o juliana, para luego freírlas en mantequilla o cualquier otro aceite vegetal.

La versión francesa se elabora con unos trozos de queso que flotan en su superficie y posteriormente se gratina; esta sopa tiene gran demanda y  se sirve como entrante en muchos restaurantes europeos.

Además de su peculiar sabor, las propiedades que tiene la cebolla para la salud son casi infinitas.

La sopa de cebolla es  una exquisita receta, tradicional y clásica  en muchas partes del mundo.

Resulta ideal para un almuerzo o bien una ligera cena, para quien tenga por objetivo, adelgazar o mantener su figura. 

Pero también puede ser  una excelente alternativa para dejar de preparar  la típica sopa de pollo que se consume frecuentemente.

Es casi seguro que no exista en el mundo una receta que se aproveche tanto de un ingrediente como esta sopa. Por su simpleza, es una de las principales opciones a la hora de elegir un delicioso y nutritivo  plato.

Historia.  Esta sopa tiene una gran historia, según el escritor de “Los tres mosqueteros”, el francés Alejandro Dumas, era “una sopa muy querida de los cazadores, gente de mala vida y venerada por los borrachos”.

En el siglo XVIII fue cuando apareció por primera vez esta sopa,  un plato humilde elaborado con ingredientes “sencillos”, a veces identificado con las épocas de abstinencia.

Se dice que  Estanislao Leczinski, antiguo rey de Polonia y apasionado de la gastronomía,  descubrió esta sopa tradicional en una fonda francesa y quedó tan impresionado por su peculiar sabor, que  quiso aprender a prepararla.

Para degustar

Algunos tips

Este tipo de sopa es recomendada para consumirla en tiempos de frío, pero es tanta su exquisitez, que no existe temperatura alguna en la que alguien pueda resistirse a degustarla. Para obtener buenos y deliciosos resultados, procure que  las  cebollas estén frescas. La principal ventaja es que no se requiere de un extenso presupuesto para su elaboración, y sigue siendo igual de nutritiva.   Hay quienes suelen acompañarla con una botella de vino tinto.

Recetas

Sopa de cebolla

(para 6 personas)

4 cebollas medianas rebanadas

2 cucharadas de mantequilla

2 cucharadas de aceite de oliva

1 cucharada de azúcar

2 cucharadas de harina

5 tazas de consomé de pollo

6 rebanadas de pan (tostadas al horno)

Media taza de queso parmesano rallado

Preparación: En una olla, ponga a calentar el aceite y la mantequilla a fuego lento. En ese mismo aceite, sofría las cebollas hasta que se pongan transparentes. Agregue el azúcar, y cuando estén doradas espolvoree la harina y revuelva constantemente por 2 minutos. Baje el fuego y agregue el consomé hasta que se cocine la cebolla. Vierta la sopa en recipientes refractarios individuales y tápelos con una rebanada de pan tostado. Espolvoree la rebanada de pan con el queso parmesano. Introduzca los recipientes en el horno y retírelos cuando el queso empiece a dorar. Sirva de inmediato.