El intermedista de los Yanquis de Nueva York, Alfonso Soriano, es el mejor segunda base en el plano estadístico, según recopilación realizada por la Major League Baseball.

Soriano se aproxima a su cuarta temporada en el béisbol profesional de los Estados Unidos y ya ha ganado el reconocimiento a base de palos limpios en su corto tiempo en las Grandes Ligas.

El año pasado, el nativo de San Pedro de Macorís tuvo un promedio de .298 con 30 vuelacercas y 91 empujadas sumando también un total de 35 bases robadas.

Soriano ya tiene en su haber dos 30-30 y algo positivo es que redujo su total de ponches en 23 (157 del 2002 a 130 del 2003), algo que le habían exigido los críticos.

Acompañan a Soriano en el grupo de la intermedia, Bret Boone, de los Marineros de Seattle.

Boone ha ido perfeccionando su capacidad en el plato y por eso ha escalado tantos peldaños en la lista de los mejores segunda base en el béisbol de las Grandes Ligas.

Boone tuvo un ligero descenso en su promedio de bateo, pero terminó con .294 aunque su total de cuadrangulares y empujadas escaló por todo lo alto en el 2003.

Sus 35 jonrones y 117 remolcadas sus dos mayores totales de por vida en ambas categorías ofensivas. También añadió 35 dobles y se robó 16 bases, ambos números redondos.

En el tercer puesto figura Jeff Kent, de los Astros de Houston, el ex compañero de Barry Bonds.

Kent perdió más de 30 partidos debido a una lesión en el 2003 y esto afectó su desempeño general del año. Pero todavía es un hombre muy cotizado en la intermedia.

A pesar de haber roto una racha de siete años empujando 100 o más carreras (93 en el 2003) se espera un repunte si la salud logra acompañarlo el año completo.

A sus 93 remolques sumó también un promedio de .297 con 22 vuelacercas.

El cuarto en la lista es el boricua José Vidro, de los Expos de Montreal, la última estrella que queda por esos lados.

Vidro posee un bate confiable que lo llevó a terminar con promedio de .315 el año pasado, superando la barrera de .300 por quinta campaña en línea.

Como quinto tenemos a Marcus Giles, el joven hermano de Brian, de los Bravos de Atlanta.

Giles tiene apenas tres años de experiencia (una temporada completa) y ya ha enseñado sus garras.

Bateó .316 con 21 cuadrangulares y 69 remolcadas en su primer año ocupando la segunda base de los Bravos.

El sexto puesto de la lista corresponde al dominicano Luis Castillo, ganador del Guante de Oro la pasada campaña y un perenne bateador de .300 en los últimos años.

Castillo bateó .319 con 39 empujadas el año pasado, incluyendo una prolongada racha de juegos bateando de hit que lo llevó a ser seguido por miles durante el año.

Vale destacar también el trabajo del séptimo en el listado, Jerry Hairston Jr., de los Orioles de Baltimore.

Este joven perdió gran parte de la campaña pasada debido a lesiones, pero ha demostrado que cuando está saludable puede responder de manera positiva ante las situaciones.

Su promedio de .271 no indica todo lo que es capaz de hacer.

En la décima posición de la lista se encuentra el prospecto José Reyes, a quien los Metros acaban de mover de posición, pero sin importar esto ya lo han colocado entre los destacados.

Se le considera capaz de batear para .300 disparar 15 jonrones y robarse unas 45 bases en un año completo. Esto representa excelencia, pura y simple.