POR DIONISIO SOLDEVILA
SAN PEDRO DE MACORIS.– El jardinero dominicano Sammy Sosa tiene una meta fija para la temporada del 2005: disparar entre 40 y 50 jonrones para así callar a sus críticos. “Me siento bien y en salud y lo que quiero para la próxima temporada es pegar entre 40 y 50 jonrones para que no me ataquen más”, dijo Sosa durante un encuentro con la prensa en el hotel Howard Johnson de esta ciudad.

El toletero señaló que los problemas que se han generado en la ciudad de Chicago con relación a su partida a destiempo del último partido de la campaña pasada han sido sobredimensionados y atribuyó los mismos a una “gran confusión”.

“Los comentarios que se han hecho, han sido principalmente porque no he querido hablar, no tengo problemas con nadie. Esto fue algo que se armó sin necesidad”, sostuvo.

Dijo que de no haberse lesionado la temporada pasada hubiera superado los 40 cuadrangulares sin problema, tomando en consideración que perdió 40 juegos debido a sus problemas de la espalda.

El encuentro con la prensa se realizó luego de Sosa participar en un operativo medico en el que se están atendiendo decenas de personas del área de Quisqueya, San Pedro de Macorís y La Romana.

Aunque Sosa mantiene la posición de que es un miembro de los Cachorros de Chicago y su intención es ir a los entrenamientos de los Cubs en Arizona, el toletero dejó entrever la posibilidad de patrullar otros jardines.

“Sigo siendo empleado de los Cachorros. No tengo problemas con ir a los entrenamientos de primavera con los Cubs”, dijo Sosa.

Pero al preguntársele sobre la necesidad de tener que ganarse el cariño de otros fanáticos, su respuesta fue clara.

“Yo me he ganado mi público donde quiera que vaya, así que si tengo que hacerlo, lo haría”, comentó.

Para Sosa, sin embargo, lo principal es dejar de lado todos los comentarios críticos que se han realizado y seguir adelante con una brillante carrera que lo ha llevado a convertirse en el séptimo mayor jonronero de todos los tiempos.

“Lo más importante es olvidarme de todo y esperar que la temporada del 2005 sea la mejor de mi carrera”, dijo.

Al referirse a sus compañeros de equipo Kerry Wood y Mark Prior, quienes han declarado públicamente que si Sosa regresa con los Cachorros tendría que pedirle perdón al conjunto por su “transgresión” al final del año, la respuesta fue pragmática.

“Si tengo que pedir perdón lo haré, porque lo cortés no quita lo valiente”, dijo. “Pero yo entiendo que no he hecho nada para tener que disculparme”, añadió el toletero.

Sosa manifestó encontrarse en una excelente condición física y dice que está en un peso de 220 libras mientras se encuentra trabajando arduamente en La Romana para prepararse con miras a los entrenamientos de primavera.

Dijo que partirá hacia Arizona en febrero, aunque se negó a especificar una fecha para su partida.

Indicó que no ha hablado con el dirigente Dusty Baker durante la temporada muerta ya que no le ve la necesidad a ello y espera llegar a los entrenamientos de primavera para ponerse en contacto con el capataz que lo criticó abiertamente todo el año.

Dejó entreabierta una posibilidad de volver a jugar en la pelota dominicana en un futuro aunque señaló que su situación actual con los Cachorros y el tiempo que se mantiene alejado de su familia son limitantes para ese deseo.

“No descarto en un futuro hacerlo (jugar en RD) pero tengo una situación delicada. Ya soy séptimo de todos los tiempos en jonrones y eso es algo que debe valorarse”, añadió.