POR AMARILIS CASTRO
La Federación Nacional de Comerciantes y Empresarios de la República Dominicana (FENACERD) sostuvo que los aranceles de los productos lácteos importados se pueden mantener entre 20 y 40% para proteger la industria nacional productora de leche y otros derivados, no obstante, proponen que el país sea liberada del monopolio que mantienen los productores europeos en el mercado nacional.
Antonio Cruz Rojas, presidente de FENACERD, planteó ayer durante una rueda de prensa que ante la situación mundial de carestía que ha elevado el precio de la tonelada de leche en polvo en los países de Europa, es necesario buscar una salida que proteja primero a la niñez dominicana y luego a los productores y procesadores de leche, sin afectar las recaudaciones fiscales que son imprescindibles para financiar el desarrollo de la nación.
Suponemos que la demanda total de leche importada en República Dominicana es de unas 100 mil toneladas y nos oponemos a tener que comprarlas de manera obligada a los productores europeos, ya que productos del monopolio que mantienen, los dominicanos pagamos un precio muy alto por un vaso de leche, que es uno de los más altos de todo el hemisferio americano, sostuvo.
Ante esta situación, la FENACERD, propone no hacer del caso de la leche en polvo un conflicto con la Unión Europea, sino más bien, propiciar la posibilidad de utilizar instrumentos como los Acuerdos de Asociación Económica con Europa (EPA), para promover el crecimiento moral y económico de los pueblos ACP.
Es decir, que no solo aumenta la leche porque viene de Europa que cuya producción lechera no es competitiva en los mercados internacionales sin altos subsidios, sino porque se evidencia un aumento del monto de la renta monopólico que produce el nefasto mecanismo de asignación de cuotas a los productores de la Unión Europea.
En conclusión la FENACERD, entiende que por varias razones es necesario que los mecanismos de cuotas privilegiadas sean eliminados, con lo cual los monopolios existentes en el mercado tendrán que competir en calidad y precio.