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La osteoporosis, que significa hueso poroso, es una condición que causa que los huesos fuertes se conviertan en débiles, haciéndolos susceptibles de fracturas.
Aunque todos los huesos pueden verse afectados por esta condición, la columna, la cadera y la muñeca son los que tienen mayor riesgo. Se estima que más de la mitad de las mujeres y cerca de una tercera parte de los hombres tendrán fracturas causadas por esta enfermedad.
En personas mayores, la fractura de cadera puede ser particularmente peligrosa, porque la inmovilización prolongada que se requiere para la recuperación produce coágulos y neumonía. Cerca de una tercera parte de la población anciana con fracturas fallece durante los siguientes seis meses.
Los dos factores significativos que contribuyen a la osteoporosis son que el calcio no es absorbido efectivamente y que las células especiales, llamadas osteoclastos, desmineralizan el hueso. Esas alteraciones son causadas por la edad y la deficiencia hormonal.
Las mujeres postmenopáusicas son especialmente propensas a la osteoporosis porque producen menor cantidad de estrógeno, hormona indispensable para mantener la salud del hueso.
La soya puede ayudar a la prevención de la osteoporosis. Recientes estudios denotan que las fracturas de la cadera son menos frecuentes en países del sureste de Asia consumidores de soya.
En general, las dietas con una cantidad baja promedio de proteína se asocian con un menor riesgo de osteoporosis, ya que los alimentos con un alto contenido de proteína aumentan la excreción de calcio en la orina.
Con una dieta basada en proteínas de soya se pierden menores cantidades de calcio en la orina en comparación con una dieta con proteínas de origen animal.
Por otra parte, la proteína de soya protege contra la osteoporosis y el riesgo de fractura mediante la promoción de un balance de calcio adecuado. Los estudios sustentan también el hecho de que las isoflavonas de la soya suprimen la degradación del hueso interactuando con los osteoclastos.
Los efectos positivos de la proteína de soya en la prevención de la osteoporosis han sido establecidos sobre la base de diferentes estudios, entre ellos:
Mujeres con postmenopausia que ingirieron 90 miligramos de isoflavonas provenientes de la soya, aumentaron la densidad de la masa ósea de la espina lumbar.
En otra investigación, 40 mujeres postmenopáusicas fueron divididas en dos grupos, en ambos casos se consumía un suplemento de calcio, pero un grupo lo combinó con una isoflavina sintética.
Después de 12 meses, las mujeres que tomaron sólo calcio redujeron la densidad ósea de la columna y el antebrazo, mientras el grupo que lo tomó combinado con la isoflavona incrementó la densidad en las mismas regiones.
