Redacción internacional. En un nuevo intento de seguir explotando el filón de los superhéroes, la factoría Marvel quiere contar con un Spider-Man eternamente joven y, tras dos películas con Andrew Gardfield, ahora apuesta por un actor más joven y menos conocido, el británico Tom Holland.
Con 19 años recién cumplidos -el 1 de junio-, Holland tiene tan solo dos largometrajes en su haber, “Lo imposible” (2012), dirigida por el español J.A. Bayona, y “How I Live Now” (2013), de Kevin Macdonald.
Será el más joven y menos experimentado Spider-Man cinematográfico, tras Tobey Maguire, que se metió por primera vez en la piel del hombre araña cuando tenía 27 años, y Andrew Garfield, que contaba con 29. Maguire encarnó al superhéroe en tres ocasiones, en 2002, 2004 y 2007 por dos de Garfield, en 2012 y 2014.
En total las cinco películas recaudaron 3.963 millones de dólares, razón más que suficiente para que Sony quiera continuar con una de las sagas más rentables del cine.