La última pelota que Barry Bonds sacó del parque se vendió el sábado en 376.612 dólares, la oferta ganadora de una subasta, por parte de un comprador que prefirió permanecer en el anonimato.
Hubo un total de 13 ofertas por la pelota que el aficionado Jameson Sutton atrapó el 5 de septiembre pasado, durante un juego contra los Rockies de Colorado, en el Coors Field.
La bola del jonrón 762 resultó una ganga, tomando en cuenta que la empresa SCP Auctions se encargó de subastar la pelota con la que Bonds rompió el récord de Hank Aaron, con su vuelacercas número 756. Aquella reliquia se vendió en 752.467 dólares.
Yo esperaba que el precio fuera más alto», reconoció David Kohler, presidente de la casa de subastas. «Si Barry Bonds no vuelve a jugar, quien haya comprado esta pelota tiene una pieza valiosa, que vale una cifra de siete dígitos».
Barry Bonds conectó su bambinazo número 762, frente al landor de la República Dominicana Ubaldo Jiménez.