POR FIOR GIL
El superintendente de Electricidad, Francisco Méndez, reiteró ayer que este año el gobierno tendrá que destinar entre 300 y 350 millones de dólares para la sostenibilidad del sector eléctrico y que por lo tanto carece de más recursos para poder iluminar el país en un 100%.

Insistió en que los sectores en donde  menos paguen el servicio tendrán menos horas de electricidad.

Méndez dijo que comprende los reclamos de algunos sectores que consideran como una injusticia que el servicio eléctrico sea racionado para satisfacer la demanda en un 70 ó 75%.

Dijo que para dar ese suministro de 70%, aunque el deseo es dar un 100%, el gobierno tendrá que destinar este año más de 300 millones de pesos para subsidiar la operación de la industria eléctrica «y con todo eso solo podemos satisfacer alrededor de un 70% o 75% de la demanda».

Manifestó que hay sectores que dicen «vuelven los apagones» y se preguntó:  quién ha dicho que los apagones vuelven no, los apagones nunca se han ido, hace 40 años que vivimos con apagones, pero diferente a momentos anteriores ahora existe un plan, hay una definición estratégica y una estructura organizada para dar al traste con esa realidad».

Méndez, al ser entrevistado por Yolanda Martínez y por Pablo McKinney en el programa En la Semana, que se transmite los

sábados por Color Visión, dijo que por ahora no se puede realizar una suscripción de los circuitos porque implicaría tener los recursos para hacer la delimitación de los mismos para no afect5ar con apagones a los clientes que pagan y tienen contratos.

Dijo que se trata de un problema que no se soluciona con una varita mágica, sino con el sacrificio y el esfuerzo de todos y en ese sentido es que se está trabajando.

«Comparto contigo que la electricidad es un asunto personal y por eso a cada  usuario llega su factura; lo que estamos diciendo es que dada la situación de precaridad, de crisis que vive la industria, en el plano inicial, como una manera de reducir los costos operativos de las empresas, se está haciendo la personalización de los usuarios, de darle seguimiento individual a los usuarios, la captación de clientes, todo eso se esta haciendo de manera paralela», agregó Méndez.

El superintendente de Electricidad manifestó que si el gobierno mantuviera un esquema de iluminación generalizada en todo el país, necesitaría 100 millones de dólares  mensuales para el pago de la factura de las generadoras y las empresas  distribuidoras no tienen esos recursos.

Adelantó que probablemente el gobierno tenga que inyectar cerca de 40 a 50 millones de dólares este mes para contribuir al sostenimiento del sector eléctrico. «Si hacemos eso, racionalizar el suministro, es para disminuir el aporte que el gobierno tiene que hacer y tratar de que sea un aporte tripartito, las empresas y los usuarios y el gobierno».

Dijo por otro lado las empresas eléctricas están haciendo un esfuerzos para cambiar la situación y la Superintendencia  también las esta apoyando.

Aclaró que se trata de enfrentar una situación de un estado calamitoso de la industria eléctrica, ya que hay ocho millones de dólares que no entran a la caja de las empresas porque se hicieron negociaciones tales como la recompra de las distribuidoras a Unión Fenosa, que actualmente segregan  cinco millones de dólares y otro acuerdo que hizo la administración pasada al final del período, mediante el cual hay otros tres millones que dejan de ingresar al flujo de las empresas.

Señaló que se trata de dinero que no entra a las distribuidoras y se pignoraron las cuentas de los mejores clientes que tienen que pagar en unas cuentas especiales. «Y entonces el gobierno tiene que dar ese dinero para que podamos encender el país en ese 70%. Qué más quisiera el presidente y nosotros que poder iluminar el país en un 100% y hacer más eficiente el proyecto de incorporación de nuevos clientes, de incentivos de cobros, de normalizacion del servicio, pero no es posible hacerlo  de un día para otro», expuso Méndez.

Afirmó que el gobierno tiene una solución integral del sector, que ha discutido con el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial.

Explicó que aunque se había anunciado un aumento de la tarifa de 30% para este enero, luego se le comunicó a los organismos multilaterales que no había necesidad de aumentar, pues es suficiente el incremento dispuesto en octubre y noviembre, de alrededor de 9.43%, y que para enero se podía hacer una reducción de un 5%, como se hizo.