La psicóloga Adrián D’Oleo Montero sugirió ayer la intervención psicológica de todos los estudiantes del curso del liceo profesor Félix Rafael Nova, de Bayaguana, donde el joven de 18 años Daniel Alberto López Vásquez (Cuchi) golpeó a una compañera menor de edad, por considerar que los testigos de la violencia también resultan afectados.
Igualmente, la directora de la Escuela de Psicología de la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña (Unphu) recomendó que al agresor no solo se le sancione judicialmente sino que también debe ser tratado psicológicamente luego que se investiguen sus antecedentes conductuales.
También consideró que al joven le conviene que se le traslade a otro centro educativo.
D’Oleo Montero dijo que llama a preocupación porque en ese acto de violencia escolar han salido a relucir varios elementos como la pérdida de autoridad de los maestros y la legitimación de la violencia por parte de los compañeros de clase, quienes en vez de intervenir en su mayoría se quedan tranquilos y optan por grabar la pelea y también cómo se sigue permitiendo a jóvenes en sobreedad en cursos con estudiantes que son niños y adolescentes.
Los estudiantes involucrados en la pelea cursan el primero del bachillerato. De acuerdo a la profesora el joven le dio una fuerte bofetada a su compañera de clase cuando esta no le permitió acercarse primero que ella a la maestra, quien le corregía una tarea.
El video de los golpes propinados a la menor de edad se convirtió en viral en las redes sociales.
La Fiscal para Asuntos de Niños, Niñas y Adolescentes de Monte Plata, Rosetty Beltré, informó que el joven López Vásquez fue entregado por su padre y un abogado a las autoridades. Será traducido a un fiscal ordinario para el proceso judicial.
El fiscal actuante, magistrado Gertrudis de la Cruz, estaba a la espera de que el Tribunal emitiera la orden de arresto cuando el joven se entregó acompañado de su padre.
La Fiscalía pedirá tres meses de prisión como medida de coerción en contra del joven por ante el juez de Atención Permanente de esa jurisdicción.
Al opinar sobre ese caso, la psicóloga D’Oleo Montero dijo que es lamentable cómo los maestros de los centros públicos y privados han perdido autoridad y se han desvalorizado.
“El maestro ha quedado descalificado como figura de autoridad por razones culturales, por manejo inadecuado del mismo maestro o porque los padres lo desautorizan”, indicó.
Entiende que si bien es cierto que no es conveniente emplear un modelo de autoritarismo en las escuelas, no ha habido una verdadera transición a una cultura de democracia basada en el respeto.