Juan Terrero 
JUAN TERRERO PÉREZ
En nuestro trabajo del 22/9/23 sobre los nacimientos de niños haitianos en República Dominicana, resaltamos la gravedad de esa situación, ya que para nadie es un secreto la presión de una serie de países grandes para que el problema haitiano se resuelva en nuestro país. Hace unos días, el alcalde de la ciudad de Dajabón, Santiago Riveron denunció que organismos internacionales pretenden obligar la permanencia en territorio dominicano a decenas de niños que nacen de madres haitianas que vienen a parir en los hospitales de esa comunidad.
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El documento del Servicio Nacional de Salud establece, paradójicamente, la ciudad de Santiago,
donde el porcentaje de niños haitianos fue menor por provincia, ya que nacieron 5 mil 324; el 52.50% correspondió a niños dominicanos, y el 47.20% fueron haitianos. En la provincia Espaillat (Moca), nacieron mil 207 infantes, 47.60% dominicanos y 52.40% de parturientas haitianas. En Valverde nacieron mil 481; 34.80% y el 64.90% fueron haitianos. Son cifras alarmantes, pero está claro que los organismos internacionales buscan despojar al pueblo dominicano de su nacionalidad.
