LOS ÁNGELES.- Devin Booker lleva tatuado en el antebrazo el mensaje que Kobe Bryant le escribió en un par de zapatillas tras un partido en el Staples Center hace seis años: “Sé legendario”.
De regreso en la cancha de su ídolo y con la ocasión de ampliar el paso de su equipo por la postemporada, Booker firmó una actuación digna de la leyenda de la Mamba Negra que dio a los Suns un boleto a la siguiente ronda.
Booker encestó 22 de sus 47 puntos en un fenomenal primer cuarto y los Suns ganaron el jueves su primera serie de playoffs desde 2010 y eliminaron al campeón vigente de la NBA, los Lakers de Los Ángeles, tras imponerse por 113-100 en el sexto juego de la primera fase de la postemporada.
“Sinceramente, estaba pensando en Kobe y en las conversaciones que tuvimos”, dijo Booker, que terminó con ocho triples, 11 rebotes y 15 canastas de 22 tiros de campo. “Sobre lo que pasamos, y la postemporada, y ser legendarios y dar los pasos necesarios para llegar allí. Ver el 8 y el 24 allí arriba, con la iluminación que tiene el Staples, es como su estuviera brillando sobre ti. Sé que estuvo aquí esta noche y sé que estaba orgulloso”, dijo refiriéndose a Bryant y a sus dorsales con los Lakers.
Más tarde, en el túnel de vestuarios, se llevó una camiseta firmada por otro de sus héroes y mentores, LeBron James, quien solo pudo maravillarse con la brillantez de su prometedor amigo durante el choque.