Estudian, trabajan y forman familia venciendo el impedimento de uno de los sentidos más importantes para desenvolverse: la vista.

En nuestro país los ciegos adultos pueden romper la barreras gracias a la ayuda del Patronato Nacional de Ciegos que desde hace 50 años los facilita formación para poder vivir plenamente aun sin poder ver la luz del sol.

La labor original del Patronato, que nació bajo la idea del arquitecto Rafael Aguayo, es la acción social, dando apoyo oftalmológico a los más necesitados. Pero con el tiempo, su labor se fue ampliando, cuenta Josefina Morfa de Kotun, presidenta de esta entidad.

Su función más importante es la rehabilitación, la cual se amplió hace más de 30 años. Según Morfa de Kotun, la rehabilitación consiste en hacer que aquellas personas adultas que se vuelven no videntes logren hacer una vida normal. “Nosotros primero les enseñamos a caminar, luego, en un espacio que tenemos preparado, los enseñamos a realizar actividades sencillas como arreglar la cama, cocinar y vestirse”, explica la presidenta.

También son alfabetizados con el sistema Braille. “Muchos de ellos van a la universidad y se hacen de una profesión”, dice.

De su lado, Wilfredo Mayén, vicepresidente del patronato, dijo que su función y aporte en este centro es básicamente ayudarlos a insertarse en el mercado laborar.

“Doy la cara por ti”. Este 2014 el Patronato Nacional de Ciegos figura entre las seis instituciones sin fines de lucro escogidas por Pinturas Tropical para ser beneficiadas con la venta de las agendas.

Para esta segunda versión Pinturas Tropical escogió, nuevamente, doce personalidades locales, quienes prestaron su rostro totalmente gratis. En el caso de este patronato , la madrina es la periodista Alicia Ortega, y el padrino el merenguero Sergio Vargas.

La madrina solidaria. Alicia Ortega manifestó que este proyecto le parece maravilloso y que aceptó en cuanto la llamaron.

“Yo estoy convencida de que uno se debe interesar e involucrarse en este tipo de causas de manera desinteresada”, dice.

Destaca que su recompensa es ver como el simple hecho de prestar su imagen puede ayudar a una institución que la necesita.

“Y estoy feliz de que a través de mi rostro gente necesitada puede recibir una esperanza”.

Esta entidad, como todas las de su género, recibe muy pocos recursos por parte del Estado. En ese sentido la periodista refiere que estas personas voluntarias suplen muchas necesidades a gente con carencias, “porque yo entiendo que desde el Gobierno se debería asignar una mejor ración presupuestaría en vez de darle tanto recursos a esas instituciones que despilfarran deberían darle más dinero a estas personas que trabajan de manera desinteresada a favor de los necesitados”, dijo.

ZOOM

Premios

Cada institución recibirá el dinero que genere la venta de las agendas que le han asignado. Adicionalmente obtendrá una cantidad extra aquella entidad que más ejemplares venda y también la que obtenga más votos en Facebook.