El manejo y control de plagas en restaurantes y supermercados ha mejorado pero falta mucho por hacer, para lo cual es necesario incrementar la educación y superar el pobre papel regulador del Estado.

Así lo afirma el presidente de la Asociación Nacional de Manejo de Plagas Urbanas (ANMPU), Reynaldo González, quien expresó que el interés de  los restaurantes y supermercados con certificarse con normas de calidad como la ISO, ha llevado a tener y cuidar la higiene en sus empresas.

Resaltó que “la higiene es control de plaga y control de plaga es higiene”, por lo que llama a la población a tomar conciencia sobre la importancia de mantener limpia e higiénica su casa o establecimiento comercial, aunque reconoce que muchas veces educar sobre esto es más difícil que aplicar una sustancia química para eliminar una plaga.

Abogó porque los empleados sean educados sobre la higiene para evitar utilizar químicos en las empresas. González ofreció sus declaraciones al participar en el Encuentro Económico de Hoy, junto a Jorge Melo, vicepresidente, de la ANMPU, y  William Kunhardt, tesorero.

Kunhardt destacó que las plagas urbanas han estado aumentando porque la ciudad es un basurero y los ratones y las cucarachas se trasladan a las casas.

Señaló que los controles de plagas urbanas deben ser realizados por empresas legalmente constituidas y autorizadas por los ministerios de Salud Pública, de Medio Ambiente y de Agricultura para operar como tales, pues está en juego la salud de los dominicanos.

Resaltó que hay un aumento de las empresas ilegales en el control de plaga, porque las autoridades están siendo débiles en aplicar las inspecciones y en velar para que trabajen con autorización.

Kunhardt  dijo que el Ministerio de Salud Publica no tiene ni siquiera un departamento para cuidar que en los establecimientos comerciales se aplique un correcto control de plagas.

El tesorero de la ANMPU resaltó que un mal uso de los plaguicidas ocasiona efectos secundarios como vómitos, mareos y fiebre, entre otros, y a largo plazo pueden ser los causantes de asma y de cáncer.

Destacó que a diario se ven casos de “Fumigadores”, que son personas sin entrenamiento y con conocimientos rudimentarios, armados de una bomba de aspersión que ofrecen sus servicios a residencias.

También esta práctica se repite en supermercados, hospitales, clínicas, escuelas, almacenes y comercio de alimentos, entre otros negocios, que no utilizan personal y empresas calificadas en sus fumigaciones. González  resaltó que las empresas dedicadas al manejo de plagas urbanas, afiliadas a la ANMPU son 22 y  estas previenen, controlan o eliminan el desarrollo de plagas, como mosquitos, cucarachas, hormigas, moscas, pulgas,  chinches, garrapatas, ratones, ratas, termitas, comején y otros.

Reveló que la plaga que más está afectando las zonas urbanas es la llamada curianita o cucaracha pequeña, que se reproduce sumamente rápido y es difícil de eliminar si no se toman las medidas adecuadas. Indicó que para matarla es utilizada una sustancia llamado cebo, que es un gel que al comerlo las mata.

Destacó que el manejo de plagas urbanas ofrece seguridad, limpieza, higiene y evita daños económicos que ocasionan dichas plagas, pues de esta forma se eliminan ciertas enfermedades causadas por insectos. Precisó que las empresas organizadas en la ANMPU  utilizan productos inocuos al medio ambiente, no son productos para plagas agrícolas y están debidamente registradas y autorizadas por los ministerios de Agricultura y de Salud Pública.