POR ODALIS MEJÍA
El secretario de Medio Ambiente suspendió ayer las conversaciones con las empresas que extraen arenas en la cuenca baja del río Nizao hasta que reinicien sus operaciones porque entiende que es imposible un llegar a un acuerdo bajo esa presión. Indicó que la suspensión de las operaciones de las mineras creará un desabastecimiento de materiales de construcción en el mercado nacional.

Advirtió Medio Ambiente que si persisten en mantener cerradas las minas permitirá las operaciones de otras canteras porque el desarrollo nacional no se puede detener simplemente porque algunos no quieran sujetarse a las normas.

Puig consideró que es irrazonable el cierre de las empresas que, por más de veinte años, han recibido los beneficios de la explotación de un recurso que es de todos los dominicanos.

“Han paralizado unilateralmente sus operaciones. Se trata de un paro patronal que afecta a cientos de obreros y empleados que afecta a las comunidades que le rodean, en el cual Medio Ambiente no tiene ninguna responsabilidad directa,” aseguró.

Explicó que las empresas tienen “una autorización transitoria que les permite operar, mientras la secretaría de Medio Ambiente concluye el proceso para permisos ambientales a aquellas que califiquen para este beneficio”.

Puig prometió que se les prorrogaría el permiso provisional si concluye la autorización temporal de operación y no está concluido el proceso para concederles el permiso ambiental definitivo.

Aseguró que quienes carezcan de condiciones para cumplir con las normas estarán impedidos de seguir operando. “Es el caso de las empresas cuyo lugar de extracción está prácticamente agotado”.

Estimó que se deben buscar opciones a la explotación de las minas en las cuencas de los ríos.

Dijo que una comisión de empresarios se reunió varias veces con el subsecretario de Suelos y Aguas, Ernesto Reyna, consideró es positivo.

Sin embargo, consideró que no se puede llegar a un convenio satisfactorio para las partes sobre la base de posiciones de fuerza.

“Esta Secretaría vela por los recursos naturales como patrimonio de todos los dominicanos. La industria de la construcción, la producción de agregados, es fundamental,” indicó.

Sin embargo, dijo, esa producción “se hará conforme a las leyes y las normas vigentes, nunca en contra de ellas”.

Declaró que, contrario a lo que señalan sectores vinculados al negocio de la extracción de grava, sí existe una normativa clara, establecida por la Ley 64-00 y por normas y regulaciones, las cuales hay que cumplir.

“Muchas empresas han estado acostumbradas a operar sin regulación alguna. Algunos productores quieren seguir trabajando sin regulaciones. Somos una nación civilizada y nadie está por encima de la Ley”, dijo el funcionario.

Señaló que esos recursos pertenecen a la nación dominicana y que su uso es permitido, pero de acuerdo a normas establecidas.