La Secretaría de Estado de Medio Ambiente informó ayer que suspendió a tres de sus funcionarios para determinar si hubo negligencia ante la devastación de un área dentro de los límites del Parque Nacional Lago Enriquillo.

Tomás Aquino Ferreras, administrador del Parque Nacional Lago Enriquillo; Guarionex Leger, gerente regional de Recursos Forestales, y Juan Pérez Cuevas, subgerente forestal de Duvergé, están suspendidos para «determinar el cumplimiento de sus responsabilidades y obligaciones de vigilancia y cuidado del área protegida».

El pasado 4 de septiembre una comisión de técnicos verificó la construcción de una trocha de aproximadamente 30 metros de ancho por 4, 144  metros de largo, que afectó especies de guayacán, cactus, cagüey, bayahonda y mangle prieto.

Por esta acción están sometidos ante el procurador para la Defensa del Medio Ambiente, los señores, Dagoberto Rodríguez Adames, senador por la provincia Independencia, y Manuel Herasme (alias Bolívar) y Ángel Euribíades Vólquez Pérez (Yuyo).

Max Puig, secretario de Medio Ambiente, creó una comisión para que realice las investigaciones y determine sobre la acción u omisión de estos empleados en los hechos ocurridos dentro del parque nacional.

«Los funcionarios y empleados de Medio Ambiente tienen una responsabilidad ante los recursos naturales que no pueden obviar. La complicidad, por acción u omisión de sus responsabilidades, con un ecocidio como el realizado en el Lago Enriquillo no puede ser pasada por alto. Se trata de una investigación de rutina. La Comisión creada debe entregar los resultados en los primeros días de este mes de octubre», expresó el funcionario.