SANTIAGO. – Las autoridades provinciales del Ministerio de Salud Pública suspendieron este miércoles por tiempo indefinido las actividades comerciales del “mercado de pulgas”, ubicado en la comunidad Los Tocones en la autopista Joaquín Balaguer, en la ruta Santiago-Navarrete, como medida para controlar la propagación del covid-19.

Salud Pública llevó a cabo la jornada en coordinación con la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas, con el objetivo de disminuir la aglomeración de personas ante el repunte del coronavirus en la ciudad.

“Estamos aquí desde las 5:00 de la mañana y hemos tomado la decisión por instrucciones superiores del Ministerio de Salud Pública y nuestros inspectores han hablado con los comerciantes y se ha aceptado sin inconvenientes”, explicó el doctor Adalberto Peña, director provincial del área uno de la institución sanitaria.

El funcionario dijo que el mercado de pulgas, que se celebra cada jueves, permanecerá cerrado hasta que sea necesario, debido a la evolución de los casos positivos de covid-19. Informó que hay un crecimiento de un 13.5 por ciento de positividad y el objetivo de las autoridades es reducirlo.

Peña también advirtió que se intervendrán todos los locales que haya aglomeraciones insostenibles, incluyendo las plazas comerciales y aquellas donde no cumplan con los protocolos pautados por las autoridades. “Si no cumplen con las normas, tendrán consecuencias”, subrayó.

El contingente presentado al lugar para cerrar momentáneamente el espacio obedeció a que las autoridades sanitarias buscan impedir las aglomeraciones, luego de varias quejas presentadas por un “desorden generado el pasado jueves”.

Por razones de seguridad sanitaria y acogiéndose al decreto 698-20 del presidente Luis Abinader que prohíbe la aglomeración de más de diez personas sin protocolo autorizado por el Ministerio de Salud se decidió clausurar el mercado de pulgas.

Luis Alberto Jiménez (Bozo), administrador del referido mercado, dijo que acogieron el llamado de las autoridades, aunque indicó que se mantienen a la espera de la aplicación de un protocolo que le permita exponer sus mercancías.