El fiscal suspendido de San José de Ocoa, Nerys Soto, levantó anoche la huelga de hambre que había iniciado frente a la Procuraduría General de la República (PGR) por considerar que su cancelación fue injusta y que no le escucharon. Soto levantó la huelga luego que la PGR acogiera sus peticiones en el sentido de que se investigue su patrimonio y el de su familia y que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos le preste ayuda en la investigación que se realiza en la Fiscalía de Ocoa.
Además, la comisión mediadora, que integran Roberto Santana, Manuel María Mercedes y Radhamés Jiménez Peña, gestionará ante el Consejo del Miniterio Público una explicación acerca de los alcances de la medida cautelar tomada contra Soto. En tanto que la Procuraduría recordó que se trata de una investigación en materia disciplinaria y que aún está en curso, por lo que no hay conclusiones al respecto, y que se conducirá con apego estricto al debido proceso.
Soto había dicho que se trata de un caso de persecución en su contra y responsabilizó al senador de de San José de Ocoa, Carlos Castillo, de cualquier cosa que pudiera pasarle. La Procuraduría se comprometió a garantizar la integridad física de Soto, quien seguirá suspendido hasta que concluya la investigación.