Los abusos de menores en instituciones públicas y religiosas de Australia son una “tragedia nacional”, dijo ayer la comisión especial que investigó la pederastia en este país en un informe final con más de 400 recomendaciones.
“Decenas de miles de niños fueron abusados sexualmente en las instituciones australianas. Nunca sabremos la cifra, pero cualquiera que sea, supone una tragedia nacional perpetrada durante generaciones dentro de nuestras más respetadas instituciones”, remarca el documento.
El presidente de la comisión, Peter McClellan, entregó el informe de 17 volúmenes al gobernador general de Australia, Peter Cosgrove, que a su vez los presentará al Gobierno. La comisión investigó durante cinco años la respuesta a la pederastia en organizaciones públicas y religiosas, incluidas las pertenecientes a la Iglesia católica, con entrevistas a más de 8,000 víctimas de abusos cometidos en más de 4.000 centros desde la década de 1920.