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Bruselas, (EFE).- El comisario europeo de Industria, el italiano Antonio Tajani, desvinculó hoy el castigo que sufre Italia en los mercados, cuya prima de riesgo ya supera los 560 puntos básicos, del anuncio de dimisión del primer ministro, Silvio Berlusconi, considerado poco claro por algunos analistas.
«El problema de Italia no es un problema personal, es un problema de la economía italiana», respondió Tajani en una rueda de prensa al ser preguntado por las repercusiones del anuncio de Berlusconi de que dejará su cargo una vez se aprueben las medidas económicas que se comprometió ante la UE a poner en marcha el pasado 26 de octubre.
«Es importante mejorar a corto plazo la política económica. No es un problema personal», reiteró el comisario, quien incidió en la necesidad de que Italia cumpla con los ajustes a los que se ha comprometido.
La situación de Italia, que hoy vuelve a registrar un nuevo máximo histórico de su prima de riesgo, que mide el diferencial entre el bono italiano y el alemán a diez años, por encima de los 560 puntos básicos y con el rendimiento exigido a sus bonos más allá del 7 %, fue calificada ayer de «dramática» por el comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, quien se declaró «muy preocupado». Tajani no quiso valorar las palabras de Rehn y se limitó a decir que no tiene costumbre de «comentar las declaraciones de sus compañeros, y mucho menos entrar en polémicas».
«Estoy convencido de que Italia hará todo lo que sea necesario para cumplir con las peticiones de la Unión Europea y la Comisión», afirmó Tajani. Añadió que está convencido de que «a pesar de las dificultades, Italia tiene los recursos, la capacidad y la energía necesarios para salir, aunque sea con grandes esfuerzos, de una situación muy difícil, siempre que todos y cada uno de los italianos haga la parte que le corresponde».
El Ejecutivo comunitario no quiso comentar con detalles la cambiante situación italiana y aseguró que su evaluación sigue siendo la misma que en ocasiones anteriores y que Italia debe cumplir con las medidas económicas a las que se ha comprometido para restauras la confianza. El portavoz comunitario de Asuntos Económicos, Amadeu Altafaj, indicó que el comisario «Rehn estaba preocupado ayer y sigue preocupado hoy», y aclaró que el cuestionario enviado desde Bruselas el viernes pasado para pedir más concreción sobre los ajustes no constituye una conclusión en sí mismo.
«No hay que sacar conclusiones, la evaluación se basará en el resultado de la misión que empieza hoy (enviada por la Comisión Europea a Roma) y en las respuestas a las preguntas», recalcó Altafaj. El portavoz precisó que el cuestionario consta de 39 preguntas que buscan aclarar aspectos como el calendario de puesta en marcha de las medidas y la extensión de las reformas estructurales. Asimismo, consideró «normal» que una carta (en referencia a la misiva que Berlusconi remitió el pasado 26 de octubre a sus socios europeos para confirmar su disposición a tomar las medidas económicas necesarias) no contenga todos los detalles que ahora solicita Bruselas.
La Comisión reiteró además que Italia ha realizado ya esfuerzos con vistas a alcanzar el equilibrio presupuestario en 2013 y que las recomendaciones de austeridad y consolidación fiscal y para potenciar el crecimiento y fomentar el empleo van dirigidas no sólo a Italia sino también a todos los países de la zona del euro. EFE
