Tanto va el cántaro al agua…

Tanto va el cántaro al agua…

En una acción sin precedentes, el Partido Revolucionario Dominicano celebró 50 marchas caravanas en todo el país, las cuales salieron a las calles a la misma hora.

Esas marchas del domingo confirmaron lo que era sabido: el Partido Revolucionario Dominicano cuenta con la simpatía de la mayoría de los votantes, quienes saben que Leonel, Danilo-más de lo mismo y la parte corrompida del Partido de la Liberación Dominicana, no hay quien lo aguante cuatro años más. Esa marcha fue un tapabocas para los deslenguados.

Fue tanto lo que cantaletearon, fueron tantas las caravanas que organizaron en una provincia y las llenaron de autos, camiones y guaguas de gente de otras localidades, fue tanto el engaño, que el PRD decidió demostrar cuántos son sus seguidores

No fue solamente la cantidad de gente que marchó, que participó a bordo de vehículos de todo tipo, sino también aquellos que desde sus casas por las ventanas, desde las azoteas, desde las aceras, sacaron el símbolo más conocido del PRD: su bandera blanca, como la pureza que perseguirá la corrupción y a los corruptos.

Mucha gente, en distintas localidades del país exhibió sábanas, pañuelos, gorras, cualquier prenda de vestir, de abrigo o de higiene, como toallas, para vivar al PRD y demostrar su simpatía y su intención de votar blanco el 20 de mayo del 2012.

Al ritmo de “Llegó Papᔠy otros aires como “Papa ´ta duro”, millares de motociclistas, carros, camionetas, yipetas, guaguas, camiones, realizaron caravanas en todo el país.

¿Y por cuál razón participaron tantas personas en tan distintos lugares en una gigantesca manifestación móvil?

Los jóvenes tienen su modo de expresar sus opiniones y una de las formas más conocidas en esta campaña es la frase que dice: “´toy jarto”.

Cierto, estoy hasta a coronilla de esta gavilla que nos desgobierna y empobrece mientras ellos se enriquecen al amparo de la corrupción más descarada.

Este grupo de tipos despreciables pueden estar podridos en dinero que obtuvieron y obtienen a cambio de hipotecar su dignidad, si alguna vez la tuvieron.

Lo más interesante es ver con el descaro que acuden a la televisión, unos y otros, a mentir descaradamente como si no fueron conocidos.

La hazaña está consumada, ello, aunque una parte de la prensa nacional haya tenido el descaro de publicar la noticia de 50 marchas al lado de una marcha en una sola localidad, como si ambas acciones fueran comparables. El peso de una noticia le tumbó el periódico hacia un solo lado, aunque le pusieran un pie de amigo.

Al Partido Revolucionario Dominicano sólo le queda un camino y le conviene una actitud: continuar trabajando y atrás el triunfalismo.

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