¿Crees que un piloto de carrera que al día de hoy corre dos o tres horas a toda velocidad es un tipo duro?

Bien, en pasado había conductores que corrían más de 9 horas continuo y sin relevos, y lo hacían en las condiciones más duras imaginables y con unos estándares de seguridad casi ridículos.

Esos eran los que en los primeros años del 1900 participaban en la famosa Targa Florio, un circuito ubicado en la isla italiana de Sicilia y que había sido organizado por primera vez en 1906 por Vincenzo Florio. El trazado original media 148 kilómetros y se recorría 7 veces, similar a 1,080 km.

Todo entre fardos de heno, burros, pueblos y más de 2000 curvas llevadas a toda velocidad.

En 1932 el recorrido se recortó a 72 km y se aumentó la cantidad de vueltas.

Desde sus inicios la Targa Florio ha sido una competencia algo más que una simple carrera, fue una de las siete maravillas de la era antigua del automovilismo, de aquellos años de pioneros corredores dispuestos a todo.

El ganador de aquel primer evento logró un tiempo sobre las 9 horas y media, y una velocidad media inferior a los 50 km/h.

La Targa Florio ha sido una de las carreras más dura y peligrosa al mundo, tan legendaria de pasar a la historia como deshumana y que solo podían llevar a cabo muy pocos pilotos.

Una carrera única que resistió hasta 1977, cuando la FIA (Federación Internacional del Automóvil) decidió clausurarla por peligrosa.

De ahí en adelante la Targa Florio solo se convirtió en Rally.

El evento, que movía un autentico tumulto de gente de más de un millón de espectadores, se preparaba entre abril y mayo de cada año, dejado anécdotas realmente jugosas, como el hecho de que la noche anterior a la organización se hiciera el recorrido del circuito con tambores para recordar a los habitantes del peligro que podrían correr al día siguiente.

Volvo XC90 T8 hibrido, el SUV más limpio al mundo

El XC90 T8 Twin Engine hibrido ha superado todas las expectativas de la ecuación «potencia + bajo consumo + elevada autonomía» con un nivel de emisiones único en el mundo, y todo ello en una lujosa envoltura exterior.

El dato de las cifras que se habían anunciado sobre elevada eficiencia se debe al continuo ciclo de innovación de la marca sueca.

El resultado ha sido una reducción de 10 g/km de contaminación respecto al pronóstico inicial, con un rendimiento de combustible de 170 km por galón y más caballería. Esto hace que el XC90 T8 Twin Engine sea el líder indiscutible de su segmento, con una excepcional combinación de bajo consumo de combustible, bajo nivel de emisiones y mas potencia.

Desde la marca aseguran que han trabajado mucho para conseguir una posición de ventaja y ofrecer a sus clientes la mejor combinación de rendimiento y consumo de combustible. La tecnología Twin Engine permite aprovechar la tradición de desarrollo de motores de una forma totalmente innovadora. La nueva arquitectura mecánica de productos y los extraordinarios motores de cuatro cilindros han colocado a Volvo en una posición destacada.

Ningún otro SUV de su categoría puede ofrecer 43km de autonomía eléctrica pura, 0-100km/h en 5,6 segundos y una potencia mixta de 407 caballos, y todo ello en una configuración de 7 plazas.