Tascas españolas en Caracas sobreviven entre esca

Tascas españolas en Caracas sobreviven entre esca

CARACAS. Caracas es la ciudad con más tascas españolas de América Latina, pero sus dueños penan por seguir adelante debido a la escasez de alimentos que los pone en aprietos para confeccionar sus platos, la inflación y una inseguridad que espanta parroquianos nocturnos.

Después de Argentina y Francia, el país caribeño alberga la tercera mayor comunidad de emigrantes españoles en el mundo, que llegaron huyendo de la pobreza de las décadas posteriores a la Guerra Civil y atraídos por el auge petrolero de la segunda mitad del siglo XX. La floreciente economía y una sociedad aficionada a comer fuera de casa desde hacía varias generaciones eran el escenario perfecto para que la potente gastronomía española echara raíces a lo largo y ancho del territorio.

El resultado son centenares de restaurantes y tascas al más puro estilo español diseminadas por todo el país con una variadísima oferta de platos y tapas de todas las regiones españolas, como el pulpo a la gallega, la fabada asturiana, el cochinillo al horno, los pimientos del piquillo o el bacalao al pil pil.

Algunos de estos platos adquirieron variantes, como agregarle vino de Jerez a la paella antes de servirla, o costumbres locales como acompañar los platos con whisky. «En Venezuela la inmigración española llegó más tarde que en otros países como Argentina.

Por eso el estilo de sus restaurantes y su cocina se mantiene más», explica a la AFP el crítico gastronómico Miro Popic, autor de varias guías de restaurantes en el país caribeño. Según Popic, «la cocina española surgió como alternativa económica a la cocina francesa, que era la más sofisticada en la Venezuela petrolera», hasta que decayó en el país a partir de los 80, con las primeras crisis y devaluaciones de la moneda.
– «Patear mucho para la mercancía» –

Publicaciones Relacionadas

Más leídas