Técnica de reemplazo de tobillos con artritis crónica

Técnica de reemplazo de tobillos con artritis crónica

Tradicionalmente  los ancianos con tobillos artríticos han sufrido tanto dolor que no pueden caminar y tienen que conformarse con llevar una vida sedentaria. Sin embargo, el implante de un nuevo tobillo  les abre una ventana de esperanza.

El cartílago del tobillo tiene un amortiguador de un cuarto de pulgada de espesor entre los huesos que permite que la coyuntura se mueva sin problemas. A aquellos que padecen artritis  les queda muy poco cartílago y cuando esto ocurre, los tres huesos del tobillo (el final de la tibia o espinilla, la fíbula o peroné y el talón)  se frotan uno contra otro causando con frecuencia un dolor fuerte.

Durante años, los ortopedas han buscado la mejor solución para el problema. Una vez se consideró la fusión del tobillo, donde los huesos se sueldan juntos permanentemente, pero se determinó que no era la respuesta adecuada.

“Lamentablemente, cuando se sueldan los huesos, se pierde movimiento. Para algunos pacientes, esto es inaceptable”, explicó  el doctor Thomas San Giovanni, cirujano ortopeda en Doctors Hospital de Coral Gables, en Miami.

Recientemente, la FDA de Estados Unidos aprobó una nueva generación de prótesis para reemplazos y ahora en Doctor’s Hospital, que pertenece a la organización Baptist Health South Florida, se emplea un tipo  con un diseño más anatómico que las anteriores. La alineación es mejor y el cirujano extirpa menos hueso. El implante tiene una cobertura especial que permite que el hueso crezca dentro del mismo por lo que no se necesita usar cemento, observó.

“El nuevo reemplazo tiene longevidad, algo de lo que carecían las prótesis antiguas.

Los nuevos aparatos han sido utilizados en Europa y lucen más fuertes en los estudios de seguimiento a los quince años”, destacó San Giovanni.

El procedimiento comprende hacer una incisión vertical en la parte anterior del tobillo y cortar y afeitar los huesos para que la prótesis ajuste bien.

Generalmente los pacientes son hospitalizados durante un par de días, usan un yeso y hacen reposo absoluto durante un mes. La terapia física dura entre seis semanas y tres meses con el paciente caminando en una bota o abrazadera.

No todos los pacientes son candidatos para un reemplazo de tobillo o artroplastia.

Procedimiento

Es mejor para pacientes mayores, no para jóvenes adultos que quieren continuar practicando deportes de alto impacto. Aquellos que tengan una deformidad seria con pérdida de hueso considerable, también deben considerar otras opciones. Finalmente, a las personas que tienen un sobrepeso importante se les convence  de hacerse la cirugía porque la coyuntura del tobillo es más pequeña que casi todas las otras.

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