Odalis Mejía 
Presa de Hatillo está destinada al riesgo y la electricidad
Ante el aumento de la demanda de agua por encima del cien por ciento de la disponibilidad en algunas regiones como Yaque del Norte y Yaque del Sur, el economista y agrónomo Frank Tejada reiteró la urgencia de construir las presas pendientes.
Recuerda que para el 2021, el país demandaba en promedio un 58% de la disponibilidad de agua, la cual va en aumento.
Tejada precisa que construir las presas pendientes traerán beneficios como mayor disponibilidad de agua para riego, consumo, como a su vez, control de inundaciones, generación eléctrica y “ahora que el mundo ha entendido la necesidad de mantener la seguridad alimentaria”.
“Es un buen momento para que los gobiernos actual y futuros, tomen la decisión de construir más presas para asegurar disponibilidad de agua para el riego de los cultivos”, señala Tejada en un trabajo en conjunto con Pablo Tejada y Julio Tejada y con la colaboración de Manuel González.
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Cantidad
Recuerda que en la República Dominicana existen actualmente 35 presas construidas y en funcionamiento. La primera, Jimenoa, se construyó en 1950 en La Vega bajo el Gobierno de Trujillo. El presidente que más presas construyó fue Joaquín Balaguer y las demás se construyeron bajo el mandato de diferentes presidentes.
La presa de Hatillo es la de mayor capacidad de embalse con 375 millones de metros cúbicos, seguida de Monción con 360, Sabana Yegua con 354, Monte Grande 350, Jigüey 167, Bao 150, Valdesia y Taveras 137 cada una, Sabaneta 63 y Rincón 60.
Tejeda indica que según estudios, actualmente hay 23 presas pendientes por construir. En la lista hay tres en río Artibonito, tres en ríos Socco y Chavón, dos en Yaque del Norte (Guayubín y arroyo Sato), una en el Masacre, Yásica, Jamao, Bacuí, Boba, San Juan, Haina, Isabela, Dajabón, Nizao, Alto Yuna, Ámina, Joca, Nizaíto y La Gina.
