Prescindir del empleo de los tejidos en el hogar dejaría las estancias desnudas, exentas de significado y de armonía. Nadie es capaz de concebir una casa u oficina sin la calidez de unas cortinas o sin la caricia que proporciona un sofá tapizado.

 Las telas son el vestido de la vivienda o mejor dicho de cualquier espacio en el que conviva algún ser humano, porque además de vestir, a través de su textura y sus colores, se transmiten mensajes claros acerca de cómo sentimos y pensamos.

Las posibilidades de combinación que  ofrecen las actuales colecciones son muy amplias. Su imaginación se puede  convertir en un arma necesaria para la creación de ambientes únicos y que puedan marcar la diferencia al momento de implementar diferentes texturas en su decoración.

Es posible que usted pueda encontrar en el mercado diseños muy novedosos y exclusivos: desde guías florales bordadas de agradable relieve al tacto hasta desenfadados estampados temáticos. Para que todo el mundo pueda encontrar algo que se acomode a sus gustos y necesidades.

Asimismo, las rayas al momento de decorar continúan reinando en interiores, aunando líneas de diferentes anchos y tonos y buscando geometrías originales.

 En lo que respecta a la composición de los tejidos, el imperio le pertenece al algodón y la lana sigue concediendo a las propuestas de hoy una versatilidad incomparable a cualquier ambiente.

Sin embargo, las propiedades brillantes de determinadas sedas o la resistencia de sintéticos como el omnipresente poliéster, llenan sus manos de ideas con las que decorar cualquier rincón de la casa con un estilo acertado y que por la resistencia de la misma es posible su implementación en lugares en que sea necesario implementar texturas un poco más resistentes.

 Ahora le toca a usted el buscar distintas telas con diferentes diseños que se acomoden y den vistosidad a lo que usted quiere reflejar.