Escasez en Venezuela.- En una de sus novelas la escritora chilena  Isabel Allende describe, casi con tinta de sangre, como el desabastecimiento y la escasez de alimentos socavaron, o contribuyeron a socavar, poco a poco el  gobierno socialista de Salvador Allende en 1973.  Los almacenes cerraron, las tiendas lucían vacías y el ganado fue llevado a otras fronteras, mientras los chilenos languidecían  y crecía el desasosiego. Salvando distancia, hoy, según las informaciones y palabras del mismo gobierno del presidente Nicolás Maduro, Venezuela enfrenta escasez de productos básicos.

Qué dice el gobierno.- Es bueno señalar que desde 2003, en Venezuela rige una fijación de precios de una gran cantidad de productos y bienes, y un control estricto sobre las divisas. En tal sentido el ministro de Comercio, Alejandro Fleming, culpa del desabastecimiento a empresas “parasitarias”,  que usan el control estatal de cambios para retener divisas que deberían ir a los  comerciantes. Maduro, que ha calificado de “grave” el problema y ha autorizado la importación de 760,000 toneladas de alimentos, pidió al Congreso la aprobación de un crédito adicional de 82.3 millones de dólares para enfrentar la situación, y ha iniciado un diálogo con empresarios de diversas áreas para sortear la crisis.

Y los empresarios.- Al parecer la escasez de productos en Venezuela no es noticia nueva. Los desabastecimientos son cíclicos. En los años 80 y bajo el gobierno de Jaime Lusinchi,  muchos rubros desaparecieron  fruto de una política estricta de control de precios que buscaba frenar una galopante inflación.  Igual sucedió en 2006. Sobre la actual crisis, empresarios señalan que la escasez  es el resultado de la caída de la producción por falta de  estímulos  a la inversión.  Siendo el eje de la crisis el extremos control de los precios y de las divisas. Mientras Maduro y los empresarios se ponen de acuerdo los venezolanos tienen dificultad para obtener leche, manteca, café, harina de maíz, jabón, toallas femeninas, algunos medicamentos  y hasta papel higiénico. Por cierto, Maduro, que tiene la misión de multiplicar las cosas buenas del fallecido Chávez, autorizó   importar, junto a las toneladas de alimentos mencionadas, 50 millones de rollos de papel de baño. ¡La cosa es seria!