Telescopio

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La quema del piloto.- Con la quema del piloto jordano Muath Al-Kaseasbeh, vivo en una jaula, según un video, la milicia “Estado Islámico” (EI) ha horrorizado al mundo. El aviador, de 26 años, había sido capturado por el grupo el 24 de diciembre luego que su caza F-16 se estrellara mientras bombardeaba en Siria. Aunque el grupo dizque quería canjearlo por una yihadista que sobrevivió a un ataque suicida y Jordania retenía, fuentes aseguran que Al Kaseasbeh fue asesinado el 3 de enero. Los extremistas, diestro en cortar cabezas, ahora ha quemado vivo un rehén, pese que eruditos musulmanes citan un hadiz, expresión de Mahoma, que condena la muerte con fuego.

¿De vuelta a la guillotina?.- En la Edad Media, Europa “inauguró” un artilugio para cortar cabezas que Francia popularizó en su Revolución, la guillotina, la cual, tiene su sitial junto a los hierros de la Inquisición, los campos nazis, los “Gulag” rusos, los métodos del Mossad y el Guantánamo de EU. Ya que si algo ha perfeccionado el hombre a lo largo de la historia es la industria de torturar. El “Estado Islámico” es una milicia que analistas aseguran tuvo su génesis de “El Ejército Sirio Libre” o “El Frente al Nustra”, grupos que tratan de derrocar al presidente sirio Bashar al Assad. Los extremistas, que buscan crear un califato en Irak y Siria, iniciaron su cruel campaña en agosto con la decapitación del periodista de EU James Foley.

Ojo por ojo.– El enmascarado verdugo del EI volvió aparecer el 2 de septiembre cuando mató al periodista de EU Steven Sotloff. El día 13 fue el turno del inglés David Haines. El 24, un grupo afín decapitó al guía de montaña francés Hervé Gourdel. Otro británico pasado por la espada fue Alan Hennig el 3 de septiembre. El 16 de noviembre la organización mostró la cabeza del humanitario de EU Peter Kassig, y el 8 de enero una milicia libia cerca al EI mató a los periodistas tunecinos Sofiène Chourabi y Nadhir Katari. Luego vendrían las ejecuciones de los japoneses Haruna Yukawa y Kenji Goto. Es secreto a voces que Irak, Siria, Afganistán y otros vecinos son “parrilladas” atizadas por bombas occidentales, y al parecer EI quiso aplicar su “diente por diente…” y asó un hombre vivo. ¿Qué más horrores harán?

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