Devastación en Filipinas.-  Las imágenes que nos llegan de Filipinas, tras el paso del tifón Bopha la noche del martes al miércoles pasado, son de desolación y desamparo. El tifón es un ciclón propio del Océano Pacífico Occidental.  Su ciclo de formación es igual a los huracanes y ciclones tropicales  desde junio hasta noviembre. “Bopha”, según el Consejo Nacional de Desastres filipino,  atacó de noche con una furia de 160 kilómetros por hora y ráfagas de hasta 195 kilómetros, y sus frutos fueron devastadores: anoche los muertos se estimaban en más de 500, los desaparecidos en unos 400  y más de 300,000 damnificados. Una pesadilla que nos hacer recordar los David, Noel, Katrina… y más reciente Sandy, y su azote por el Caribe y  parte de Estados Unidos.

En honor al rey Felipe II.-  La República de Filipinas es una nación insular formada por un archipiélago de 7,107 islas, de las cuales 730 están habitadas. De este enjambre de islas –Luzón y Mindanao- son las más grandes. Filipinas está ubicada en el sudeste de Asia. Al este limita con el mar de Filipinas, al oeste con el mar de China Meridional y al sur con el mar de Célebes. Tiene una extensión territorial de 300,000 kilómetros cuadrados. Y su población es de 94,852,000 habitantes. Su capital es Manila. Las islas se llaman Filipinas  en honor al rey Felipe II de España y es considerada como la única nación hispánica en Asia. En la guerra de 1898, Estados Unidos derrotó España, se apoderó de Puerto Rico, Guam, Cuba, y de “ñapa” del archipiélago filipino.  La lucha no cesó hasta lograr su independencia el 4 de julio de 1946.

Ruta de ciclones.-  La forma de gobierno es República presidencialista. Actualmente su presidente es Benigno Aquino III y el vicepresidente es Jejomar Binay. El  Senado lo  integran  24 miembros y la Cámara de Representantes (Diputados) con 250.  Filipinas es miembro de  ONU, de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) y del Foro de Cooperación  Económica Asia-Pacífico (APEC).    Las islas filipinas comparten dos “bendiciones” con el Caribe. Ambas zonas han sido  colonias y puntos estratégicos de los imperios y, también, son rutas de tifones, ciclones o huracanes, como usted quiera llamarlo.