Desde hace varias semanas las agencias internacionales no cesan de colocar notas e imágenes de las violentas protestas que vive Haití. Los haitianos han tomado las calles en repudio a la supuesta malversación de más de 2,000 millones de dólares del programa Petrocaribe, y piden la renuncia del presidente Jovenel Moise. Luego estalló Barcelona, España, tras la condena a 9 líderes independentistas catalanes. Otra región que arde desde hace un tiempo es Hong Kong en contra de un proyecto para extraditar detenidos a Pekín. Pero la ira se ha expandido y hay protestas en Irak, Líbano, Ecuador, Colombia, Bolivia y Chile. ¿Tendrán algo en común estas manifestaciones?
De Irak a Ecuador.- En Irak las protestas convocadas en repudio al desempleo, corrupción y falta de servicios han dejado casi 200 muertos. En Líbano todo explotó cuando las autoridades trataron de colocar un impuesto a las llamadas por las redes sociales: WhatsApp, Facebook y Viber. En Ecuador, el presidente Lenín Moreno, en un caso parecido al del presidente dominicano Salvador Jorge Blanco en abril de 1984, se sometió a las fórmulas del Fondo Monetario Internacional (FMI), y quitó los subsidios a los combustibles y la violencia fue brutal: ocho muertos, miles de heridos y detenidos. En Colombia el enojo surge con el asesinato de 155 líderes sociales, y el caso de Bolivia es por la reelección de Evo.
Descontento y frustración.- Pero en donde se “paran las aguas” es en Chile. La furia explotó tras al aumento del pasaje del Metro y luego se sumaron otras demandas. Así Santiago y otras ciudades se convirtieron en campos de batallas. Ya suman 19 las muertes. ¿Qué ha desatado tanta ira? Aunque las demandas pueden variar de un lugar a otro, analistas creen que habría un denominador común en muchos casos: el descontento social y la frustración que asola a millones de personas.