Representantes de organismos antinarcóticos internacionales se reunieron de urgencia ayer con las principales autoridades que enfrentan el narcotráfico en el país, debido a que existe «gran preocupación» por que la zona del Cibao, especialmente Santiago, se habría convertido en el lugar de operaciones de personeros de carteles colombianos.

Se teme que carteles colombianos se hayan asentado en el Cibao, donde estarían moviendo fuertes sumas de dinero para pagar el tránsito de importantes alijos de estupefacientes que son llevados a Estados Unidos, vía Miami.

De acuerdo con fuentes judiciales, ha llamado la atención de las autoridades internacionales y locales que grandes cargamentos decomisados, incluyendo los 1,387 kilos atribuidos a Quirino Ernesto Paulino Castillo, tenían a Santiago como destino final en el país.

Además, recientemente fue decomisado en Gazcue un alijo de 39 kilos de heroína a tres colombianos y un venezolano, quienes admitieron que llevarían la droga a un lugar indeterminado de Santiago.

Y hace menos de 24 horas fue detectado un cargamento de 128 kilos 810 gramos de cocaína en el puerto de Puerto Plata.

Preocupa, también, las frecuentes desapariciones de personas de «reputación dudosa», que luego aparecen muertas de manera violenta, así como las ejecuciones masivas, como la ocurrida en una casa en construcción de Navarrete, Santiago.

Sobre esta situación de violencia, el procurador general Francisco Domínguez Brito dijo que en Santiago los carteles operaban bajo la protección de políticos y militares.

Se presume, según las fuentes, que los carteles pagan sumas millonarias para operar a sus anchas en la zona del Cibao, donde tienen buenos «contactos» alejados de la sede central de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD).

La Dirección Nacional de Control de Drogas ( DNCD) informó  que persigue a Juan Danilo de Jesús Jiménez, a quien acusa de ser el responsable de intentar introducir a los  Estados Unidos vía el muelle de Puerto Plata, 128 kilos y 810 gramos de cocaína, dentro de un contenedor de ropa.

Agregó que la droga era transportada en 116 paquetes, encubiertos en 10 mil unidades de pantalones, que habrían sido comprados en una empresa de zona franca de Santiago, y que su destino final era El Bronx, Nueva York.

El vocero de la DNCD, Buenaventura Bueno Torres, afirmó que en el operativo participaron cuatro unidades caninas, en coordinación con el Centro de Información Conjunta, que dirige el coronel Radhamés Antigua Sánchez.

Indicó que en el formulario de envío figuraba De Jesús Jiménez como la persona responsable de la mercancía y también como receptor de la misma en los Estados Unidos.

«O sea, que este ciudadano se auto enviaba la droga, lo que nos hace creer que además de él, hay otros implicados, por lo que no descartamos que forme parte de una red internacional», manifestó.

Señaló que, al parecer, el inculpado fue enterado de que la operación había fracasado porque a la hora de la salida no se presentó al muelle y se desconoce su paradero.

Precisó que en las investigaciones preliminares ha salido a relucir que el presunto responsable es nativo de Moca y que tenía poco tiempo en el negocio de la exportación de textilería.

Agregó que para identificar el producto los presuntos capos tintaron de varios colores la parte superior de los paquetes, y que esta modalidad está siendo usada con mucha frecuencia como códigos internos por las diferentes redes que operan en el mercado internacional.