COLOMBO. AP. La Organización de las Naciones Unidas condenó ayer lo que calificó como “baño de sangre” en la zona de guerra del norte de Sri Lanka, tras dos días de ataques con proyectiles que según un doctor del gobierno mataron a por lo menos 1,000 civiles de la etnia Tamil, incluyendo a 106 niños. 

Los voluntarios excavaron fosas comunes en zonas pantanosas, colocando de 50 a 60 cuerpos en cada fosa, explicó el doctor V. Shanmugarajah, que trabaja en un hospital provisional de la zona de guerra. El médico aseguró que una enfermera fue asesinada junto a su familia en una trinchera que luego fue cubierta de tierra y convertida en su tumba.

 Shanmugarajah aseguró que el hospital sufre una falta grave de personal y que muchos de los heridos durante un ataque del sábado aún no habían recibido atención médica el lunes por la mañana. 

“La tasa de mortalidad en el hospital está aumentando, pero no podemos hacer nada”, dijo el doctor.  Un portal de internet asociado con los rebeldes acusó al gobierno del ataque, mientras que este negó usar algún tipo de artillería en la zona.  “Naciones Unidas ha denunciado el baño de sangre a medida que hemos visto el continuo aumento de muertes entre civiles durante los últimos meses”, dijo ayer Gordon Weiss.

Sri Lanka, el antiguo Ceilán

Sri Lanka  es un país insular al sureste  de la India. Por su cercanía con este gran país -la India- muchos le llamaban “Lágrima de la India”. Durante la colonización inglesa en 1802 pasó a llamarse “Ceilán”. En 1972     recuperó su nombre.

  Tiene una extensión de 65,610 kilómetros cuadrados, y su población es de 20,743,000 habitantes. El gobierno es una mezcla de sistema presidencial y parlamentario. Debido a su ubicación en el camino de las principales rutas marítimas, Sri Lanka es un vínculo naval estratégico entre el Asia occidental y el sudeste asiático. Es un país multiétnico y multirreligioso. Se practica el budismo, hinduismo, islamismo y el cristianismo. Su ciudad más poblada y capital económica es Colombo. Sri Lanka es productor de té, café, caucho y coco.

 En las últimas dos décadas, Sri Lanka ha estado hundido en un conflicto étnico entre el gobierno nacional y el movimiento insurgente Tigres de Liberación del Eelam Tamil.

A   inicios de  2002, los dos bandos en conflicto acordaron un alto al fuego. Las condiciones de ese acuerdo se encuentran bajo negociación y la situación política del país sigue siendo incierta.

Siete años después de este pacto la comunidad internacional he sacudida por horrendas masacres en este país.