Si bien es importante que las obras se terminen rápido, también es necesario que el dinero que genera esa inversión estatal llegue a varias manos, que el capital no se concentre entre un grupo de contratistas
POR SOILA PANIAGUA
En el Colegio Dominicano de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores (CODIA) se desconoce el reglamento sobre la Ley Contrataciones de Bienes, Servicios, Obras y Concepciones del Estado, lo que crea el temor a que sea excluyente y en perjuicio de los pequeños contratistas.
El planteamiento lo hizo el ingeniero Teodoro Tejada, ex presidente de esa entidad, quien planteó que las contrataciones deben ser por el nivel de la inversión para que los pequeños puedan entrar en las licitaciones.
Refirió que Eric Hazim, director general de Contrataciones Públicas, dijo recientemente que el reglamento sobre la aplicación de las Ley 340 y 449 -06 ya estaba listo, pero hasta el momento los principales actores del sector lo desconocen, porque no se les ha llamado para informarles.
La ley 340 y la 449 son leyes excluyentes y están destinadas para beneficiar a los grandes contratistas. Aquí en este país hay que abrir el abanico de las contrataciones y los funcionarios tienen que entender que llegan ahí, porque el pueblo vota por ellos y que tienen que redistribuir las obras, porque lo que se ha querido vender es que un grupo de contratistas, que se ha hecho ricos porque pertenece a un anillo, y hacen todas las obras en todos los sitios, cuestionó.
Tejada dijo que se han dado casos de que le quitan la obra a un pequeño constructor para dársela a un mega contratista, lo que contribuye a empobrecer a los de menos poder económico.
Nosotros, como ex presidentes del Codia estamos luchando porque ese reglamento no vaya al Poder Ejecutivo, sin que antes el gremio lo conozca, afirmó Tejada.
Expuso que según ese reglamento las contrataciones se harán por el tipo de obra, y que no es así como debe clasificarse, sino por categoría, por el nivel de capital.
Advirtió Tejada que el Codia es una institución poderosa en el país, con 22 delegaciones, ocho de las cuales son regionales, tiene 35 núcleos y 140 dirigentes en todo el territorio nacional, por lo que si exigen a un funcionario para que aplique las leyes y redistribuya correctamente las obras los efectos se sentirán.
Explicó que el reglamento de las leyes 340 y 449 debe especificar que cuando una obra sea rescindida al contratista se le debe hacer su cubicación al cierre y que se obligue al funcionario a pagar, para evitar la quiebra del constructor.
Según Tejada, hay contratistas que ahora se ganan todos los concursos, porque se han hecho ricos con el grado a grado, el cual se eliminó con la Ley 499, pero ahora ellos siguen en ventaja, porque se quiere clasificar por el tipo de obra.
Agregó que ese reglamento establece que la Dirección General de Contrataciones de obras del Estado tener proveedores.