Temores infundados

Temores infundados

La Junta Central Electoral (JCE) no debería sentir temores por lo que puedan hacer los medios de comunicación con los resultados de las elecciones del 20 de mayo que les sean transmitidos por ese organismo.  No tiene razón para modificar la resolución de su pleno que dispone la transmisión de los resultados electorales en la medida en que vayan siendo recibidos y depurados. El temor expresado por lo que puedan hacer los medios con esos datos, necesariamente oscila entre la precaución y el prejuicio.

La Sociedad Dominicana de Diarios, a través de su presidente, Persio Maldonado, director del colega matutino  El Nuevo Diario, con justa razón ha catalogado de injustificados los temores del presidente de la JCE, doctor Roberto Rosario, pues la transparencia del proceso electoral se hace más evidente cuando los datos electorales son difundidos en la medida en que se van generando. El trabajo de los medios es difundir la data electoral sin alterarla.

La JCE no tiene, pues, fundamento para temer por el comportamiento de los medios de comunicación y tiene la autoridad suficiente para actuar si, por excepción, algún medio distorsiona la información recibida de ese organismo. La resolución que dispone la transmisión simultánea de los datos a los medios informativos debe mantenerse como un soporte de la transparencia.

Bien por Puerta de Hierro

Los contratos de suministro de electricidad  son individuales, como individuales son las facturas por consumo. Las responsabilidades entre el individuo contratante y el suplidor no son vinculantes hacia terceros. La Asociación de Juntas de Vecinos del sector Puerta de Hierro ha hecho valer estas reglas al exigir que la CDEEE le suspenda el suministro de energía a quienes no la paguen en ese sector, sin afectar a quienes pagan.

La CDEEE y las Edes han evadido siempre la responsabilidad de respetar la individualidad de los contratos de energía. Castigan con apagones a todos los usuarios de un sector porque algunos no pagan. La incapacidad para cobrar la energía servida las lleva a pisotear los derechos de la gente que paga puntualmente el uso de la electricidad. Quizás ProConsumidor deba meter las narices en esto, de la manera valiente que lo ha hecho en otras circunstancias. Bien por Puerta de Hierro.

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