NAIROBI, Kenia. El papa Francisco desea llevar un mensaje de paz y reconciliación al continente africano, pero el tema de su seguridad es tan preocupante que podría verse obligado a cambiar su itinerario. El pontífice partió el miércoles a lo que será su primera visita al continente, que lo llevará a Kenia, Uganda y la República Centroafricana.
Es la primera vez que un papa viaja a una zona en conflicto: en la República Centroafricana arde una pugna entre cristianos y musulmanes que lleva ya dos años. Antes del viaje, el portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, insistió en que no hay amenazas graves y que el papa seguirá su itinerario tal como está programado. Pero como prueba del alto nivel de alerta en la Santa Sede, el jefe de la escolta de Francisco realizó una visita de último minuto a Bangui para inspeccionar mejor el terreno, y sólo acompañará al papa una vez que aterrice en Nairobi la tarde del miércoles.
El jefe de la escolta papal, Domenico Giani, dijo al partir que podría haber “una pequeñas modificaciones” al itinerario si se detecta alguna amenaza, como por ejemplo contra las fuerzas de paz de la ONU o contra la población civil. Antes de ir a la República Centroafricana, el pontífice hablará de temas prioritarios para él en Kenia y Uganda, como por ejemplo la pobreza, la necesidad de proteger al medio ambiente y la necesidad de que las distintas religiones se entiendan a través del diálogo. Es probable además que hable del tema de la corrupción, en un exhorto a los gobernantes de la región.
La organización Transparencia Internacional catalogó a Kenia en el puesto 145 de 174 países más corruptos del mundo, mientras los críticos del presidente de Uganda Yoweri Musevni denuncian que la mala administración ha empeorado durante sus tres décadas de gobierno. Se estima que el pontífice hablará del tema durante su primer encuentro el miércoles con el presidente keniano Uhuru Kenyatta, quien esta semana declaró que la corrupción es una amenaza a la seguridad nacional.
En Kenia, Francisco además pronunciará un discurso sobre la importancia de proteger al medio ambiente en la sede del Programa Ambiental de las Naciones Unidas, poco antes de que comience en París una crucial conferencia sobre el cambio climático. Además visitará una barriada pobre de Nairobi y dará palabras de aliento a jóvenes cristianos de Kenia tras el ataque a una universidad en abril en que murieron 150 personas.