Esta entrega a Hoy fue depositada el viernes, aclaratoria antes de empezar. Las elecciones congresionales y municipales programadas a efectuarse ayer, todos los pronósticos de firmas de sondeos asignaban un barrido al PLD, como de seguro será.

Empero, ese arrastre traduce una disminución casi al exterminio de la disidencia, de otro partido fuerte, como debió ser el PRD, y no lo es, y ambos casos no benefician los mecanismos del sistema democrático de escoger con votos, sin que necesariamente traduzcan óptimos beneficios a los votantes, en relación a de por quienes y por cuales motivos votan. No beneficia al sistema porque emite señales claras de que la ciudadanía percibe un secuestro de la democracia, y sobre el particular vertieron pareceres el doctor Hugo Tolentino Dipp (El Caribe 28-04-10); ingeniero Leandro Guzmán (El Nacional 06-05-10); Samuel Santana (HOY 08-05-10); Miguel Pineda López (HOY 06-05-10) y finalmente Bernardo Vega (HOY 13-05-10).

De manera que no soy solitario en mi preocupación, por demás, que confieso admirar en muchas facetas al presidente Leonel Fernández y sobre todo, me inspira respeto como persona y obligatoriamente, como gobernante.

Porque el presidente Leonel restableció las relaciones diplomáticas con Cuba, algo que ningún gobernante hizo desde el rompimiento en 1959; pensionó a los militares constitucionalistas, que tampoco ningún gobernante se dignó.

Fue el primero que tendió el palio umbrío de la protección al derrocado presidente hondureño Manuel Zelaya; postuló por el derecho de fundar el Estado Palestino. Estrenó relaciones con el belicoso coronel Muammar El Gadafy de Libia. Procura una solución al tránsito vial primero con los elevados, luego con el Metro I y ahora II y el tren Haina-Santiago.

Formalizó la venta del 49% de REFIDOMSA con Venezuela. Pero debe y tiene que cortejar la democracia, fortalecer la disidencia en el PRD, reducir el endeudamiento externo que al 31-12-09 era de US$8,200 millones y el déficit fiscal que este año será de RD$50 mil millones.