Como es normal, el paso del tiempo produce pérdidas de la concentración de colágeno y elastina de la piel así como la disminución de los niveles hormonales de estrógeno. Esto contribuye a que se produzca un aumento del diámetro y una pérdida de tensión vaginal. De igual forma, el parto provoca la pérdida de la estructura óptima de la vagina, pues debido al paso del bebé por el canal vaginal,  éste se estira, elonga y rompe muchas fibras que provocan su relajación.

Así lo expresa el ginecobstetra Isaías Pumarol, quien explica que para mejorar este problema existe un procedimiento quirúrgico, no invasivo llamado “tensado vaginalT, que utiliza el exclusivo efecto térmico de la luz láser fotona “para la contracción y tensado del canal vaginal, y así crear una disminución en su diámetro”.

Indica que esta nueva tecnología “mejora la calidad de vida sexual mediante el efecto tensor en las paredes vaginales y creación del nuevo colágeno para reforzar y mejorar el sostén y problemas de incontinencia”.

Para realizarlo, explica, en posición ginecológica se coloca un espéculo especial y a través de éste se introduce la pieza de mano del láser, para transmitir la luz mediante un cono de oro reflejándose 360 grados.

Se debe procurar tratar toda la superficie del canal vaginal. “Se realiza un reforzamiento en el anillo de constricción (punto G) y el introito vaginal”, señala.

Pumarol indicó que el procedimiento dura de 10 a 15 minutos y no necesita ningún tipo de anestesia.

Beneficios.   El especialista señala entre los beneficios que este procedimiento tiene para la mujer que mejora la sensibilidad y placer sexual, disminuye el tiempo para alcanzar el orgasmo, disminuye la predisposición a sufrir de prolapso vaginal, así como el riesgo de sufrir de incontinencia urinaria de esfuerzo.

Las relaciones sexuales se pueden reanudar a las 48 horas del procedimiento y no posee contraindicaciones ni complicaciones conocidas.

Por otro lado, el efecto funciona como tratamiento para mejorar los casos de incontinencia urinaria, cuando la paciente tiene pérdidas de orina involuntarias, al hacer una fuerza brusca, estornudar, reír, etc…

“El objetivo de este procedimiento láser es devolver la tensión necesaria a la uretra y paredes vaginales de sostén para eliminar la pérdida involuntaria de orina. Se trata de un procedimiento sencillo, totalmente ambulatorio, que no corta tejido, no produce molestias durante o después del tratamiento y no requiere inhabilitación o recuperación”, explica.

A pesar de…  Como indica Pumarol, para realizar este procedimiento no importa si la mujer tiene el dispositivo intrauterino (DIU): “El efecto térmico del láser solo es disparado a las paredes vaginales, no hay efecto alguno sobre el cuello”.  Además, también se puede aplicar aun cuando se tenga la menstruación,  siempre y cuando no tenga un flujo abundante.