Haitianos y dominicanos enfrentados en la zona por cierre del mercado y construcción de canal.
Desde ayer el mercado binacional que operar en la frontera dominico-haitiana fue cerrado por las autoridades dominicanas como forma de prevenir el contagio de COVID-19 por la situación que se vive en el vecino país ante el auge de los casos de coronavirus que mantiene el Sistema de Salud Haitiano al borde del colapso.
Sin embargo, estas medidas mantienen a la zona fronteriza bajo tensión debido a que los comerciantes haitianos aseguran que no fueron notificados de estas acciones y piden que se les permita entrar al país para realizar sus actividades comerciales, al tiempo que ciudadanos de la provincia Dajabón, una de las localidades que ha suscitado el interés de las autoridades de salud por encontrarse allí la cepa brasileña de la COVID-19, aseguran que el flujo de personas cruzando la frontera se ha mantenido de forma normal pese a las medidas anunciadas por las autoridades dominicanas.
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A pesar de las denuncias de los dominicanos en la zona, los comerciantes haitianos demandan a las autoridades que dejen pasar a los pequeños negociantes para recoger sus ajuares y asegurar sus puestos de negociación en la zona.
Las autoridades permiten el paso a través de la frontera dominico-haitiana a los nacionales haitianos que cuenten con la documentación necesaria para la cruce de un país a otros, sin embargo, los pequeños comerciantes se quejan de que se tienen que acercar a la puerta de la frontera a hablar directamente con los guardias que la custodian para que estos dejen pasar a sus empleados indocumentados.
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Ante la confusión por las medidas las autoridades locales dominicanas aclararon que el paso de personas y vehículos entre la República de Haití y la República Dominicana no ha sido detenido, y que el cierre solo se limita al mercado nacional.
Otra situación que sirve de caldo de cultivo para la tensión en la zona es las expectativas de protestas en Dajabón de grupos nacionalistas que exigen que Haití detenga la construcción de un canal que desviaría las aguas del río Masacre. Sobre el tema, las autoridades nacionales y haitianas han intentando llegar a un acuerdo, sin embargo, hasta el momento no ha sido posible y las negociaciones han sido suspendidas por República Dominicana hasta tanto el vecino país no suspenda la construcción del canal.