POR MANUEL JIMÉNEZ
El gobierno e inversionistas privados aportarán unos US$25 millones para la terminación del Hospital Metropolitano de Santiago, cuya construcción se paralizó en el 2003 a causa de la crisis económica que afecto el país, anunció ayer el Presidente Leonel Fernández.

El mandatario hizo el anuncio en su despacho del Palacio Nacional, en presencia del doctor Rafael Sánchez Español, presidente de la empresa que auspicia el proyecto; así como del senador José Hazim Frappier, accionista del proyecto y de monseñor Agripino Núñez Collado, rector de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra.

Estaban presentes, además, los secretarios, de la Presidencia, Danilo Medina; de Salud Pública, Sabino Báez y Administrativo de la Presidencia, Luis Manuel Bonetti.

El hospital, cuya construcción se inició en enero del 2000 y está ubicado en la autopista Duarte, a la entrada de Santiago, tiene un nivel de ejecución de un 60 por ciento y operará como un Centro de Medicina Avanzada, explicó a HOY el doctor Sánchez Español.

Desde un principio se proyectó una inversión global de US$48.4 millones, de cuyo monto se ha invertido alrededor del 60 por ciento, dijo Sánchez Español.

La inversión que realice el Estado le será devuelta en acciones y en atenciones al público, se explicó.

Además del doctor Sánchez Español y del senador Hazim Frappier, figuran como accionistas del hospital los empresarios Félix García, José Clase, Ángel Rosario Viñas, Fernando Aníbal Capellán y la empresa Mera Muñoz & Fondeur, entre otros.

El presidente Fernández dijo que el gobierno se siente complacido al poder colaborar con un grupo de inversionistas de la región norte, para la terminación de un hospital que, según estimó, va a revolucionar la atención médica en la República Dominicana.

Recordó que el proyecto hubo de ser paralizado cuando se encontraba en un 60 por ciento de su construcción, como resultado de la crisis económica que afectó al país.

Fernández explicó que la participación del gobierno en este proyecto es a través de una fórmula de revalorización del capital accionario.

«Es decir, el gobierno va a aportar equipos, va a aportar recursos para la terminación de la obra y esto se reconocerá como una participación del Estado en el capital accionario del hospital», añadió.

Dijo que de esta manera el Estado podrá garantizar el acceso a los servicios que este centro hospitalario puede ofrecer a personas de escasos recursos de la región norte.

El presidente Fernández felicitó al equipo médico y a los empresarios de Santiago que han tenido la visión de embarcarse en un proyecto de esta naturaleza y dijo esperar que el centro ya pueda comenzar a operar en el curso del año entrante.

De su lado, el doctor Sánchez Español dijo a HOY que este centro estará en capacidad de prestar servicios a una región integrada por 14 provincias, con unos 4 millones de habitantes.

Destacó que el centro cuenta con una participación institucional de la Universidad Católica Madre y Maestra y conexiones con hospitales del extranjero.

Valoró enormemente el impacto social que tendrá la participación accionaría del Estado en el hospital.

Dijo que esto garantiza que pacientes de escasos recursos tengan acceso a una medicina de calidad y avanzada, incluso en casos como trasplante de riñón, intervención elevadamente costosa en el país.

Sánchez Español dijo que todo Santiago se siente muy agradecido por la decisión del presidente Fernández, de ayudar en la terminación de un hospital que «ayudará en forma dramática a elevar la atención médica en toda la región norte del país».

«Este proyecto fue detenido en su momento por el azote de una crisis económica», dijo Sánchez Español.

Aseguró que se estima que la inversión faltante es de unos US$25 millones y que esos recursos serán aportados en conjunto por el gobierno y los inversionistas privados que iniciaron el proyecto en enero del 2000.