Testigo

Testigo

A propósito de Acroarte y de las últimas medidas tomadas por su Comité Ejecutivo (término que después de muchos años utilizándose ahora es motivo de urticaria en algunos), en cuanto a erradicar el cabildeo para favorecer a determinados nominados de los premios Casandra, es prudente hacer algunas precisiones para no dejarnos confundir.

Hace unos años, un reconocido productor de espectáculos lanzó a los cuatro vientos que en Acroarte había que fumigar para acabar con ese mal. Ninguno de los miembros de Acroarte que hoy protestan por una medida que deben aplaudir, le dio el frente a esas declaraciones ¿?

Y no dejaba de tener cierta razón el mencionado productor. Hoy, cuando el actual ¡Comité Ejecutivo! se embarca, no sólo en acabar con ese cáncer, sino en mejorar la credibilidad de la institución ante la opinión publica (lo que ha logrado con creces, gracias a la seriedad y la pulcritud con que se ha manejado desde su llegada a la dirección de Acroarte hace poco menos de cuatro meses) encuentra a su paso la vocinglería de gente que no ha despertado a la realidad: la campaña por la presidencia de Acroarte ya terminó.

En esos miembros no existe una real preocupación por el fortalecimiento institucional de Acroarte, ni un verdadero interés en preservar la unidad, todo gira en torno a sus apetencias personales, que hoy se ven reducidas por medidas que tendrán que acatar, porque nadie está ni estará por encima de los estatutos.

[b]QUIEN ASÍ LO PIENSE ESTÁ MUY EQUIVOCADO[/b]

Las protestas, una o dos, están ahí. Ya mañana, con nombres y apellidos, se sabrá quién estuvo de acuerdo con las medidas y quién las combatió y, al final de la jornada, las verdaderas razones, como el corcho, saldrán a flote.

El trabajo del actual Comité Ejecutivo, refrendado por el Consejo de Asesores, la Comisión Mixta de los Premios Casandra y la mayoría de los miembros de Acroarte, seguirá en marcha aunque para llevarlo a feliz término se tenga que recurrir a la expulsión de gente que se compruebe que incurran en la dañina práctica del cabildeo.

En alusión a aquellos que se sientan inseguros con esta vigilancia, le recomendamos una vieja frase que hemos escuchado desde nuestra niñez y reza así: “el que tenga miedo que se compre un gato prieto”.

[b]EL PAPARAZZI…[/b]

El Paparazzi llegó sorprendido por la foto semidesnuda de la ex conductora de televisión en plena vía publica… Pero bueno, Paparazzi ¿y las cosas que ocurren en esta media isla todavía le sorprenden?… El Marketing lo permite todo cuando se trata de promocionar un producto. A propósito, el Paparazzi se quedó sin habla al descubrir a los muchachos de “Melao Criollo”, quienes invitaron a cuatro hermosas jovencitas a una cena en la avenida Núñez de Cáceres esquina Luis F. Tomén, pero cuando llegaron al lugar las mozas se toparon con un puesto de “chimichurris”… ”Al mío no le ponga tomate”, se escuchó decir a Amaurys.

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