Dos administradores del edificio donde vivía Gabriel Villanueva, acusado del homicidio de su pareja Amdreea Celea, testificaron que en la casa del victimario podían escucharse peleas entre él y sus parejas.

Ante los jueces del Segundo Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, la testigo Damiana Morel Domínguez, quien estuvo a cargo del residencial cuando ocurrió la muerte de la joven de origen rumano, el primero de septiembre de 2018, afirmó que Villanueva llegó a mostrar una actitud violenta mientras estaba con Celea en su casa y, en otra ocasión, con otra mujer a la que cortejaba.

Detalló que hubo una vez en la que el imputado, estando en compañía de Celea, rompió una ventana con el pie y fue llevado a una clínica porque se lastimó dicha parte del cuerpo.
La testigo de 84 años, que declaró de forma virtual debido a que guarda aislamiento por sospecha de covid-19, definió el comportamiento del antiguo residente (que ahora guarda prisión preventiva) como “agresivo y antisocial”.

De su lado, Reimy Castellanos, quien administró el edificio antes de Morel, testificó que de la casa del imputado llegaron a ver mujeres que salían corriendo y objetos que eran lanzados desde la ventana.

Nadie las vio heridas. A partir del contrainterrogatorio del abogado del imputado, los testigos declararon que en ningún momento presenciaron que Villanueva golpeara a las mujeres ni las vieron salir heridas de la casa del enjuiciado.

Además, el representante legal recordó que su defendido está siendo juzgado por un homicidio, no por un comportamiento anterior que “nadie ha podido demostrar”.
El juicio contra Gabriel Villanueva continuará el lunes 28 de este mes con la presentación de más testigos propuestos por el Ministerio Público.