Texas demandó este martes al Gobierno del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, por permitir que los agentes de la Patrulla Fronteriza corten el alambre de púas colocado por ese estado en su frontera con México.
El fiscal estatal Ken Paxton aseguró en un comunicado que los agentes de la Patrulla Fronteriza “regularmente” cortan la cerca de alambre y a veces “inmediatamente” después de que trabajadores de Texas han colocado alambre nuevo para cubrir los huecos existentes.
Sostuvo que al cortar el alambre de púas el “Gobierno federal no solo ha destruido ilegalmente la propiedad del Estado de Texas, sino que también ha interrumpido los esfuerzos de disuasión” del gobernador Greg Abbott para detener la inmigración indocumentada.
Paxton sostuvo que Texas “tiene el derecho soberano de construir barreras fronterizas para impedir la entrada de extranjeros ilegales».
La demanda fue presentada contra al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y su titular, Alejandro Mayorkas, así como contra la Patrulla Fronteriza y varias otras agencias y funcionarios que de acuerdo con el fiscal ayudaron y alentaron los cruces fronterizos ilegales.
Con la querella Paxton ha pedido al Tribunal Federal del Distrito Oeste de Texas que prohíba a las autoridades federales “continuar destruyendo y dañando propiedad privada”.
El alambre de púas colocado a lo largo del río Grande (río Bravo en México) por Texas ha sido criticado por defensores de los derechos humanos, quienes advierten que estas barreras ponen en peligro a los migrantes.
El Gobierno de Biden y Texas sostienen otra batalla legal por la instalación de una barrera de boyas en el río Grande en julio pasado.